¿Cómo se encuentra a nivel personal en su segunda temporada en el CD Leganés?
Me siento muy bien, la verdad. Esta temporada estamos bien situados como equipo que es lo más importante. En el plano personal también estoy muy bien y, sobre todo, muy contento.
Y ese vestuario, ese equipo revelación de esta temporada, ¿en qué punto se encuentra?
También bien por lo general, aunque llevamos una serie de varios partidos sin ganar, pero el equipo sigue bien. El último partido lo perdimos ante el Real Madrid, pero las sensaciones fueron otras muy distintas, bastante buenas contra uno de los mejores equipos del mundo. Pero veo al grupo muy metido. Las sensaciones son buenas a día de hoy.
Supongo que esa racha 'negativa' no empaña el resto de la temporada ni hace que ustedes duden de su buen trabajo.
No, en absoluto. Realmente creo que el último mes fue muy intenso para nosotros, jugando dos partidos por semana prácticamente, con la Copa durante la semana y la Liga para después. Ahora veo al equipo mejor. Tenemos más tiempo para preparar los partidos y se empieza a notar. Creo que todo va a ir mejorando.
Eliminan al Real Madrid en cuartos y se meten en las semifinales contra el Sevilla. ¿Cómo se vivió desde dentro esa gesta en la Copa del Rey?
Fue una gran experiencia, la verdad. Hicimos partidos muy buenos, porque antes de eso también eliminamos al Villarreal, después al Real Madrid con la vuelta en el Santiago Bernabéu, que fue increíble. Contra el Sevilla tuvimos nuestros momentos buenos y creo que pudimos pasar. Ellos demostraron ser superiores en la eliminatoria y solo podemos estar muy contentos por la historia que hicimos para este club en la Copa. Igual nos ha pasado factura el torneo para la Liga, pero la temporada es así: vas teniendo momentos buenos, momentos menos buenos y otros malos. Lo que hay que intentar es trabajar bien para que en esos momentos malos las cosas cambien.
Abandonó Las Palmas en enero de 2017 y recaló en Leganés con el objetivo de salvar al equipo. Lo hizo y ahora vive buenos momentos, desahogados en la tabla clasificatoria y con esas semifinales de Copa. ¿Se lo imaginaba todo esto?
¡Qué va! No esperaba que nos fueran a salir las cosas tan bien. Como te digo, a día de hoy estoy muy contento. Desde que llegué todo ha sido muy bueno, muy positivo para mí y mi familia. El equipo está mejorando mucho como club también y eso se nota. Ojalá siga así y podamos seguir creciendo. Pero no, no me imaginaba que fuéramos a conseguir tantas cosas cuando salí de Las Palmas.
¿Cómo le sentó salir de la UD Las Palmas de aquella manera? Su salida fue sin hacer ruido, casi por la puerta de atrás.
No soy una persona de hacer ruido, de hablar, de decir. Soy una persona más del verde, de trabajar, de hablar solo en el campo. Realmente, me llamaron varios compañeros tuyos y no quise hablar porque todo se dio muy rápido. Sinceramente, me dolió mucho salir de la UD Las Palmas porque estaba muy a gusto, muy contento. Pero bueno, pasó así y al final llegué aquí a Leganés donde estoy soy feliz y conseguimos el objetivo de la salvación. No obstante, es cierto que me dolió salir del club.
¿Le quedó una espinita clavada por cómo se dio su salida?
Sí. Sobre todo porque me encontraba muy bien en la Isla, muy feliz tanto yo como mi familia. Es difícil cambiar de lugar cuando te sientes bien en él. Estaba realmente contento en Las Palmas. Además, se dio todo tan rápido... Si por ejemplo, hubiese sido algo más previsto, que llevara sin jugar algún tiempo o me hubieran dicho que no contaban conmigo y tal, pues tienes tiempo para asimilarlo, para pensar, para entenderlo mejor. Sin embargo, fue todo muy rápido y en un par de días ya me marché. Fue difícil.
¿Y tuvo un dolor añadido que en su lugar llegara Jesé Rodríguez, un fichaje con más presumible caché que el suyo?
Salí para hacer sitio a otros jugadores y eso lo hacen todos los equipos, pasa en todos lados. Ellos quisieron traer gente y yo tuve que marcharme. Hasta ahí. No me podía quedar seis meses sin jugar. Así es el fútbol. No tengo nada en contra de Las Palmas ni mucho menos, que quede claro. Al final las cosas me salieron bien porque aquí en Leganés estoy jugando bastante, logramos el objetivo que queríamos y estamos creciendo. Pero sí, en su momento me dolió salir de la UD Las Palmas.
¿Le sorprende el bajón que ha dado la UD en el último año?
Pues sí, la verdad. El pasado curso empezamos muy bien y cumplimos rápido los objetivos. Después las cosas empezaron a cambiar y acabaron muy mal la temporada. Este año parece que es un poco lo mismo que al final. Cuando estuve allí jugamos muy bien e hicimos muy buenos partidos que guardo con gran recuerdo. Quizá se esperaba una mejora y no al revés. Es una pena porque tengo amigos ahí y tengo cariño al club y a la afición más que nada. Su afición no merece estar en la posición en la que se encuentra ahora. Tienen que trabajar a ver si pueden cambiar esto y se logran salvar. Realmente creo que pueden salvarse.
¿Qué recuerdo le queda de su paso por la UD Las Palmas durante una temporada y media?
El cariño de la afición. Me gustaría agradecerles desde aquí lo que me apoyaron y lo bien que se portaron siempre conmigo. Me quedé muy tocado cuando salí y fue una alegría enorme encontrarme con el apoyo de todo el mundo. A mí no me gustan las redes sociales y no tengo, pero en los perfiles de mi hermano llegaron varios mensajes de aficionados. No los pude contestar todos, pero me llegaron muy fuerte. Eso es lo que más me llegó de todo.
¿Cuál es el secreto de este Leganés y cómo es el entrenador Asier Garitano?
Es un técnico muy trabajador al que le gusta ver trabajar a los suyos a tope. Después creo que todos estamos comprometidos con el equipo. Aquí no hay estrellas, la única estrella que hay es el equipo. Tenemos un vestuario muy bueno, una pequeña familia. Otro aspecto importante es que sabemos a los que jugamos, tenemos las cosas muy claras a desarrollar en el campo. Tenemos las ideas siempre claras. Eso es lo que refleja al Leganés.
