Un grupo de arquitectos de Studio Junction se ha inspirado en la tipología tradicional de la antigua vivienda comercial para crear el proyecto Casa Mjölk. El diseño de Peter Tan, Christine Ho Ping Kong, Joe Lin, Andrew Waller, Maziar Shafiee habla de una alternativa a la residencia unifamiliar y muestra cómo se puede renovar un edificio de 1889 en un estilo contemporáneo acorde con las características físicas actuales de la calle.

Para ello se ha restaurado la histórica fachada, una de las últimas realizadas en metal prensado que quedaban en una de las vías principales, se ha transformado la planta baja en una tienda de diseño y una galería, y el segundo y tercer piso se han convertido en estancias residenciales creando una vivienda.

En un inicio los arquitectos se encontraron con un sitio muy largo y estrecho, con ruido, falta de luz en la mitad del edificio y falta de conexión con el exterior. Los patios y patios de luz se utilizan para solventar algunos de estos problemas, consiguen que estos proporcionen privacidad, espacio al aire libre, el ingreso de luz natural y ventilación, características de las que carecía la construcción hasta el momento.

La madera es estrella en toda esta casa, elegida por su calor original, por representar la naturaleza y por su facilidad de portabilidad y prefabricación. Los elementos blancos y negros destacan sobre este material. El roble blanco se utiliza para la cocina, la isla, los gabinetes y los baños, las escaleras, las guardas y las molduras. Las puertas de rejilla, puertas plegables y ventanas fijas que cubren el patio interior y patio de luces también están realizados con este material. El abeto se utiliza para la sala de estar y las unidades del suelo.

Mjölk se convierte así en una tienda independiente de creación y una galería, que a través de un diseño innovador, es un ejemplo de cómo un edificio individual puede contribuir a una palpitante vida en la calle aportando elementos nuevos a un barrio en pleno rejuvenecimiento.