El Gobierno canario presentó ayer a los sindicatos la única alternativa viable para evitar despidos en la Administración autonómica: reducción de la jornada laboral y recortes salariales. El Ejecutivo plantea suprimir dos complementos retributivos en la paga extra de Navidad de los 60.000 empleados de la Comunidad Autónoma y reducir la jornada y los salarios del personal laboral indefinido y temporal, medida que afecta a 3.500 trabajadores. El ahorro que se prevé en el capítulo de Personal supera los 100 millones de euros.
El consejero de Presidencia y Justicia, Francisco Hernández Spínola, explicó ayer la cruda realidad a los representantes de los funcionarios y les ofreció un pacto por el cual el Gobierno se compromete a no provocar despidos pero a cambio de disminuir salarios y complementos con el fin de recortar los gastos de personal, que suponen cerca del 20% del presupuesto de la Administración autonómica.
"Apelo a un gran acuerdo para preservar los puestos de trabajo, mi responsabilidad como consejero es evitar que haya despidos y por eso necesito el apoyo y la responsabilidad de los empleados públicos y de sus representantes", indicó el titular de Presidencia.
La Consejería de Presidencia estima que con la supresión del complemento específico y de destino en la paga extra de Navidad la Administración se ahorrarán 65 millones de euros. No está cuantificado aún el impacto presupuestario por la reducción de la jornada laboral y de los salarios del personal laboral, pero Función Pública hace números para concretárselo a los dirigentes sindicales mañana viernes en una Mesa General de la Función Pública que se ha convocado previa al Consejo de Gobierno del sábado, que aprobará un proyecto de ley en tal sentido. No obstante, se prevé que al menos se puedan ahorrar más de 100 millones de euros.
