El presidente canario, Paulino Rivero, animó ayer a los alcaldes a "salvar obstáculos" para llevar a cabo el plan de empleo social, destinado a dar trabajo a familias con todos sus miembros en paro.

En su blog personal, Rivero defendió que el Gobierno que preside "sigue sin cruzarse de brazos ante esta dolorosa realidad y multiplica esfuerzos". Por ello, en el último debate sobre el estado de la nacionalidad avanzó un decálogo de medidas para "garantizar la cohesión social e impulsar la economía", entre ellas el citado plan en colaboración con la Federación Canaria de Municipios. "No es fácil. Son muchas las dificultades, pero si todos estamos comprometidos con los que peor están pasándolo entre todos seremos capaces de salvar obstáculos", indicó.

En su opinión, "cuando el objetivo es favorecer la contratación de personas pertenecientes a familias con todos sus miembros en paro -por un periodo inicial de seis meses- Gobierno y ayuntamientos deben estar y van a estar todos a una".

Esta iniciativa, en cualquier caso, forma parte de la Estrategia contra la Pobreza, auspiciada por el Ejecutivo, cuya meta es articular un conjunto de medidas que favorezcan el empleo social, amplíen la cobertura de la Prestación Canaria de Inserción (PCI) a personas en riesgo de exclusión o que promuevan un abaratamiento de los alquileres.

Emprendimiento

La Estrategia consta de cinco grandes pilares: el plan de empleo social; el impulso de herramientas contra la exclusión; el apoyo a la infancia, vivienda y desarrollo humano. El primer punto contará con financiación de las diferentes administraciones públicas canarias y contempla acciones para la promoción del empleo juvenil, mujeres, personas con discapacidad, y el impulso de una Ley Canaria de Emprendimiento.

Para la ampliación de la PCI se revisará su actual ley reguladora, "garantizando la financiación necesaria". Además, se impulsarán medidas adicionales a las puestas en marcha en los comedores escolares y se promocionarán los alquileres sociales a familias con rentas bajas.

"Muy por encima de cualquier otra circunstancia todos estamos obligados a trabajar de la mano", concluyó Rivero.