Viendo las dificultades para tener un nuevo gobierno, ¿ha llegado la hora de cambiar el modo de hacer política en España?
El resultado de las elecciones nos llama a tener mayor capacidad para intentar llegar a acuerdos, lograr puntos comunes por el futuro de España y los españoles. Desde luego, lo que no es un indicio para esa nueva política es que el PSOE se haya negado desde el primer momento a hablar con el PP.
¿Y el momento de suavizar las diferencias en campaña para acentuar las coincidencias?
Sin duda el lenguaje bronco enrarece el clima y los responsables políticos no debemos traspasar ciertas líneas. Eso se traslada a la sociedad y esa imagen de España enfrentada no es buena. Prefiero una campaña electoral con un tono más amable.
Dice el señor Errejón (Podemos) que el pacto entre PSOE y Ciudadanos espera por el PP. ¿Acudirán a esa cita con la abstención?
No. Quien tiene 90 diputados es el señor Sánchez y nosotros somos la primera fuerza política. Nada nos parece más democrático que un gobierno presidido por quien ha ganado las elecciones.
¿Temen el crecimiento de los apoyos a Podemos en una nueva cita electoral?
El PSOE está descapitalizando su proyecto y es posible que ya no aglutine al electorado de centro-izquierda. Lo que resulta fundamental es que el voto de centro-derecha no se disperse y tenga en el PP su casa común, porque la izquierda siempre está dispuesta a juntarse con tal de echarnos.
O sea, tiene recorrido el mensaje de mejor votar al PP que hacerlo a Ciudadanos.
Seguimos siendo el partido mayoritario y el que vertebra el centro-derecha en España.
En el escenario muy posible de que haya elecciones nuevamente, ¿es hora de cambiar la primera línea? ¿Deben ser Rajoy, o José Manuel Soria aquí, de nuevo candidatos?
Rajoy se ha mostrado dispuesto, entusiasmado y con fuerza para presentarse de nuevo. Ganó las pasadas elecciones y confiamos en él.
¿Hay postureo en lo que se ha denominado nueva política?
Leía ahora en el periódico que parece ser que la diputada Rosell montó ayer [por el miércoles] en el aeropuerto una escena porque no le daban la sala de autoridades. Me parece que hay algunos que reivindicaban ser nueva política y se están mostrando como la cara más dura de la casta. Lo estamos viendo en comportamientos sectarios como el de declarar persona non grata a Mariano Rajoy en Pontevedra, además con el apoyo del PSOE, lo que me parece más preocupante.
Sabe que la diputada Rosell lo niega, ¿no?
Bueno, pero hay informaciones al respecto.
Dijo Rajoy sobre la corrupción: "Esto se acabó y aquí ya no se pasa ninguna". ¿Es que antes había mano blanda?
La sociedad reclama a los políticos comportamientos ejemplares y decisiones contundentes. El partido en estos últimos casos ha demostrado esa contundencia. Quienes utilizan las siglas del partido en su propio beneficio no representan los principios y valores del PP.
Lo que es innegable es que cada vez aparecen más casos.
Conocemos casos que afectan al PP, pero si hacemos una panorámica y miramos a otros partidos, tanto el número de casos como las cantidades presuntamente defraudadas son mayores.
Como militante del PP, tampoco debe consolar mucho que los haya peores, ¿no?
Cualquier situación de corrupción, sea del partido que sea, daña la confianza de los ciudadanos. A todos nos afecta y descorazona cada nuevo caso.
Rita Barberá afirmó ayer que no ha ordenado ningún blanqueo de dinero. ¿La cree?
Esas son sus explicaciones y si alguien no la cree, debe demostrar su culpabilidad. Me alegra que haya dado esas explicaciones.
¿Ha tardado demasiado en ofrecerlas?
Habría sido mejor que lo hubiera hecho antes para evitar tanto ruido a su alrededor.
El partido sí la debió creer cuando ensoleró su condición de aforada dejándola en la Diputación Permanente del Senado.
Es aforada por ser senadora por designación autonómica. De todas maneras, es bueno dar explicaciones y se lo agradecemos.
Esperanza Aguirre dimitió sin estar imputada en ningún caso. ¿Le reconfortaría que otros miembros destacados de su partido tomaran el mismo camino?
Las responsabilidades se asumen de forma personal cuando uno lo considera oportuno. Entiendo que ella ha creído hacer lo mejor para el partido en este momento.
Insisto, ¿le reconfortaría que otros siguieran sus pasos?
Pues desde luego es mejor para nuestro proyecto que den un paso atrás aquellos que consideren que no están aportando al partido.
¿Hay alguien en esa situación? ¿Pensaba eso de Aguirre un día antes de su renuncia?
Ella dio explicaciones. Si uno quiere defender su inocencia, lo mejor es ofrecer explicaciones.
¿Les pasaría factura la corrupción en unas nuevas elecciones o la memoria es frágil?
La corrupción siempre es dolorosa y el votante del PP es exigente. Me enorgullece que sea así, pero nadie duda, y las encuestas lo dicen, que el PP volvería a ganar.
¿La pérdida de diputados responde a la corrupción o al desgaste de la acción de gobierno?
Ambas circunstancias han afectado. No han sido años sencillos y quizá algunos prefirieron quedarse en casa o votar a otras opciones. Pero si hay elecciones, la confianza en el PP sería más necesaria que nunca, porque algunos pensaron que votando a Ciudadanos lo hacían al PP y ahora ven que eso no era así.
¿Tienen capacidad para recuperar esos votos?
Los españoles saben que nuestra fórmula es segura para evitar que Pedro Sánchez siga cediendo. Hoy [ayer para el lector] hemos conocido por Carme Chacón que el pacto ofrece un referéndum para la independencia de Cataluña.
¿Dentro del pacto PSOE-Ciudadanos? ¿Lo cree posible?
Las ansias de poder de Pedro Sánchez le llevan a tener amistades muy peligrosas. Es capaz de vendernos a todos los españoles y ponerse en un camino tan peligroso como el de ceder ante los independentistas catalanes.
¿Cataluña va a ser independiente?
Tajantemente no. Compartimos la historia y nos une el futuro.
Hasta ahora se había arreglado con dinero, pero esa fórmula parece que ya no vale.
En los últimos años, los independentistas han gobernado utilizando los sentimientos para no dar cuenta de su gestión. Es muy peligroso y habrá que trabajar muchísimo en los próximos años para desmentir esas fantasías y revertir la intolerancia hacia el resto de España.
¿Y volverá a costar dinero?
No es un tema de dinero, sino de recomponer los sentimientos.
¿Se plantean flexibilizar su postura sobre el cambio del modelo territorial?
En esta legislatura se debe abordar un cambio en el sistema de financiación que permita a las comunidades autónomas atender sus servicios públicos de una manera más equilibrada, justa y acorde con las responsabilidades que ahora están asumiendo. Son cosas que se pueden abordar desde la lealtad institucional. A eso estamos dispuestos, pero no a ceder ante chantajes.
Gran Bretaña hizo un referéndum sobre la independencia de Escocia. ¿Cuál es la diferencia?
En primer lugar, que hay una Constitución votada por los españoles, además de forma muy mayoritaria en Cataluña, que nos une como nación. Me parece que reinventar historia y sentimientos no es lo más acertado.