La población de Canarias creció en 7.488 personas durante el primer semestre del año pasado, para situarse en 2.244.480 habitantes a 1 de julio, gracias a la llegada a las islas desde otros países de 10.177 ciudadanos extranjeros, según datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística. En el primer semestre, las defunciones superaron en Canarias a los nacimientos en 1.925 personas.

El número de residentes en las islas que se mudó a vivir a otros lugares de España rebasó en 204 al de las personas que tomaron el camino inverso y se trasladaron desde la península o Baleares al Archipiélago. Los 2.129 habitantes que Canarias perdió por esas dos vías (saldo vegetativo y saldo migratorio interior) se vieron compensados con creces por la llegada de personas desde otros países: en total, llegaron desde el exterior 9.675 personas. Y ello, como resultado de la entrada de 10.177 extranjeros y la salida de 502 españoles. Los nacionalidades mayoritarias entre los extranjeros que se mudaron a Canarias en la primera mitad de 2020 son la colombiana (1.863 personas), venezolana (1.759), italiana (1.353), cubana (1.077), británica (685) y marroquí (377).

El aumento de la población extranjera en casi 100.000 personas compensó el incremento de la mortalidad y la caída de la natalidad registrada durante el primer semestre de 2020 por la pandemia, según datos del INE, que mantienen la población en España en 47,3 millones.

Según la Estadística de Migraciones del primer semestre de 2020 que publica este jueves el INE, un período que estuvo marcado por la covid y la restricción de la movilidad, la población de España aumentó en 18.953 personas y se situó en 47.351.567 habitantes, que pese a la leve subida es el valor máximo de la serie historia.

El INE explica que el crecimiento poblacional de España se debió al incremento de la población de nacionalidad extranjera –99.183 personas, hasta un total de 5,3 millones–, ya que la de nacionalidad española se redujo –en 80.230 personas–