La primera activación Eagle Eye de 2021, que se ha llevado a cabo en el archipiélago canario entre los días 19 y 23 de abril, ha concluido con éxito. El Mando Operativo Aeroespacial (MOA), bajo control operativo del Mando de Operaciones, ha liderado este ejercicio, que concluyó ayer en Lanzarote. Esta actividad del MOA se desarrolló dentro del marco de las operaciones permanentes de las Fuerzas Armadas, que se llevan a cabo las 24 horas del día los 365 días del año.  

Más de 2.000 efectivos tomaron parte en el Eagle Eye, en el que se realizaron más de 70 misiones aéreas y, aproximadamente, 175 horas de vuelo. Además, la activación se llevó a cabo cumpliendo todas las medidas de prevención frente a la Covid-19, destacan desde el Ministerio de Defensa

El objetivo de la activación Eagle Eye 21-01 fue el de asegurar, mediante la coordinación de medios aéreos, terrestres y navales, la integración conjunta de todas las capacidades y la eficiencia del Sistema de Defensa Aeroespacial nacional. De esta forma se consigue maximizar la eficiencia de los medios de las unidades para garantizar la vigilancia y defensa del espacio aéreo de soberanía e interés nacional.  

Para ello, se hicieron diferentes misiones aéreas defensivas como respuesta a incursiones y movimientos de aeronaves no identificadas, a través de las que se consiguió mejorar el entrenamiento de todos los medios participantes.  

Estas actividades operativas pusieron de manifiesto la alta capacidad y eficacia de las Fuerzas Armadas para contribuir a la seguridad y defensa de España mediante la sinergia entre sus mandos componentes.  

Medios personales y materiales

El Ejército del Aire aportó seis aviones de combate Eurofighter Typhoon del Ala 11, además de la Jefatura del Sistema de Vigilancia y Control Aeroespacial (JSVICA) y sus unidades, entre las que destacan el Centro de Operaciones de Vigilancia Espacial (COVE) de la Base Aérea de Torrejón y las ubicadas en el archipiélago canario: el Grupo de Alerta y Control (GRUALERCON) y los Escuadrones de Vigilancia Aérea (EVA) 21 y 22.  

Las diferentes respuestas a los peligros potenciales se ejecutaron con los medios más apropiados para cada ocasión, empleando tanto los Eurofighter del Ala 11, como las Unidades de Artillería Antiaérea y la fragata 'Álvaro de Bazán'. Del mismo modo, se compartió con todas estas plataformas la situación aérea en tiempo real para comprobar la comunicación y eficacia de los enlaces disponibles.  

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El Núcleo de Fuego durante el ejercicio 'Eagle Eye 21-1' Ministerio de Defensa

Durante la activación, aviones de combate del Ejército del Aire simularon atacar posiciones de los Sistemas de Armas para que el personal pudiera entrenar de forma simulada cómo combatir una amenaza aérea. 

Por parte del Ejército de Tierra intervino el Primer Grupo de Artillería Antiaérea 35/90 (GAAA I/73), con base en Cartagena (Murcia), que incluyó la integración de una Unidad de Defensa Antiaérea (UDAA), cuyo núcleo de Fuego estuvo compuesto de distintos sistemas de armas como el Mistral del Regimiento de Artillería Antiaérea 71 (Fuencarral-Madrid), NASAMS del Regimiento de Artillería Antiaérea 73 (Cartagena) y del Regimiento de Artillería Antiaérea 94 (Gran Canaria) y HAWK del Regimiento de Artillería Antiaérea 74 (Sevilla). Asimismo, desplegaron en esta activación la Unidad de Transmisiones del Mando de Artillería Antiaérea y una Compañía de Infantería perteneciente al Regimiento Soria 9 (Fuerteventura), con el apoyo del Mando de Canarias

Para realizar tal integración, la Unidad de Transmisiones del Mando de Artillería Antiaérea (UTMAA) estableció los enlaces pertinentes entre el Centro de Operaciones de Artillería Antiaérea Semiautomático Medio (COAAAS-M) y el Grupo de Alerta y Control del Ejército del Aire con base en Gando.  

En cuanto a la Armada, la fragata 'Álvaro de Bazán', integrada en la 31ª Escuadrilla de Superficie y con base en el Arsenal Militar de Ferrol, contribuyó a las operaciones de defensa aérea gracias a su radar multifunción SPY 1-D. Además, aprovechando la presencia en aguas canarias, se materializaron numerosas colaboraciones, especialmente con unidades del 802 Escuadrón (SAR) y la Unidad de Seguridad de Canarias.