En las últimas semanas han llegado a Canarias pateras con un número inusual de mujeres, sin que esto suponga un cambio de tendencia. Sin embargo, la procedencia de los migrantes que arriban a las costas si ha sufrido alteraciones con respecto al año anterior. De las 5.386 personas que han entrado de manera irregular a España a través de las costas canarias en lo que va de año, el 75% son de origen subsahariano y el 25% magrebí. Según datos de Cruz Roja, esta proporción ha variado con respeto al mismo periodo de 2020, cuando solo el 5% de los migrantes eran magrebíes. Con respecto al género de quienes llegan en patera a las Islas, el 84,9% son hombres, frente al 15,1% que son mujeres. En los primeros cinco meses del año pasado, el porcentaje de mujeres fue incluso mayor, ya que las féminas supusieron el 20,2% de las personas que llegaron al Archipiélago de manera irregular por vía marítima.
El director de Emergencias de Cruz Roja, Íñigo Vila, explica que al llegar un alto número de mujeres en determinadas pateras puede parecer que ha cambiado el perfil de los migrantes pero, al observar la estadística global, esa posibilidad se descarta. «Estaríamos preocupados si viéramos que aumenta el número de mujeres y niños, porque tendríamos que estar preparados para ofrecerles una atención especial, ya que son los más vulnerables», alega Vila.
Con respecto al repunte de llegadas en los últimos días, el director de Emergencias de Cruz Roja no señala directamente a la crisis diplomática entre España y Marruecos, aunque afirma que puede ser un factor más. Para él, los picos de salida de pateras se producen por una suma de circunstancias, entre las que se incluyen la buena meteorología o la falta de seguridad en la costa africana.
Julio Pérez sostiene que el repunte de llegadas no está relacionado con la crisis diplomática
El portavoz del Gobierno de Canarias, Julio Pérez, aseguró el martes en el Parlamento regional que no es posible concluir que el repunte se deba a una situación intencionada de Marruecos. Además, añadió que «no parece físicamente posible que en Canarias se repita lo que se produjo en Ceuta» y señaló que el flujo de migrantes tiene otras motivaciones que no están relacionadas con los conflictos políticos.
Por su parte, el delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, apuntó ayer que ante los repuntes hay que estar «ojo avizor», pero quiso contextualizar estas llegadas en el marco de que el ramadán y el mal tiempo hicieron que mucha gente estuviera esperando en la costa marroquí. No obstante, subrayó que al Gobierno le consta que Marruecos ha interceptado en los últimos días entre cinco y seis embarcaciones irregulares rumbo a Canarias.
Pestana cifró en 2.500 los migrantes que permanecen en el Archipiélago tras haber llegado a las islas de manera irregular y añadió que, de este total, entre 1.600 y 1.700 están en centros, 300 en los recursos de acogida integral y el resto en recursos compartidos con la comunidad autónoma.
