Redes de voluntarios, más vigilancia y más sanciones para cuidar los montes

Cuidar y proteger los montes del Archipiélago se ha convertido en un objetivo prioritario del Ejecutivo autonómico, que ya ha abierto a información pública el nuevo Plan Forestal de Canarias. Un documento que establece la planificación estratégica de las Islas para evitar la deforestación y luchar contra los incendios. Por el momento solo es un borrador, pero ya incluye medidas preventivas concretas como establecer equipos de vigilancia en zonas de alto riesgo de incendios, crear grupos de voluntarios para realizar actuaciones de conservación del medio o imponer sanciones efectivas para las infracciones que se detecten.

El Ejecutivo canario se ha «adelantado» y ha decidido renovar el plan actual, que data del año 1999, antes de que llegue su fecha de caducidad en 2027. «El que existe no está adaptado a las nuevas normativas y tampoco está preparado para afrontar los retos forestales y medioambientales que requiere Canarias», afirmó ayer el consejero de Transición Ecológica y Energía, Mariano Hernández Zapata, quien animó a «todas las personas a hacer aportaciones y mejoras» a la propuesta en los próximos 45 días hábiles. El borrador nace del «consenso» y de un proceso participativo en el que intervinieron personal técnico forestal y personas vinculadas al sector como propietarios de terrenos forestales y asociaciones.

En los últimos años, los montes de las Islas han sufrido importantes daños como consecuencia de grandes incendios como el ocurrido el pasado verano en Tenerife que llegó a afectar a un perímetro de más de 90 kilómetros y casi 15.000 hectáreas a lo largo de 12 municipios. Situaciones con las que el renovado plan pretende acabar. La propuesta incorpora las líneas de actuación para los próximos 21 años, con acciones planificadas en el tiempo y con indicadores que permitan no solo su implementación, sino también su evaluación cada siete años.

El documento incluye actuaciones para conservar y mejorar la biodiversidad

El objetivo que marca el plan es que la gestión forestal sea sostenible ambiental, económica y socialmente, para lo que el Gobierno regional ha fijado tres ejes de actuación generales. El primero de ellos engloba las acciones del territorio que tengan que ver con la gestión forestal sostenible de forma planificada. El segundo eje está sujeto a las acciones socioeconómicas y culturales, encaminadas a la defensa del Patrimonio Público y al uso recreativo, así como a la promoción de actividades en la naturaleza de forma respetuosa y compatible con los ecosistemas. Finalmente, el tercero está encuadrado en las acciones institucionales y la gestión pública, mejorando la coordinación administrativa entre las distintas entidades con competencia forestal.

Para cumplir con estas líneas estratégicas el borrador incluye medidas de repoblación forestal y actuaciones para conservar y mejorar la biodiversidad. Además de propuestas para estudiar el impacto del cambio climático en la masa forestal canaria y prevenir el daño que este puede causar. Para el Ejecutivo autonómico es importante que, una vez se apruebe el plan, la gestión se haga de la mano de las administraciones locales y supramunicipales, para concretar, «entre todos», las líneas de actuación que permitan «proteger y potenciar la masa forestal del Archipiélago».

Según los datos del Gobierno de Canarias, la superficie forestal de las Islas supera las 578.227 hectáreas y representa el 78% del total. El 25% de esta es superficie arbolada, siendo el pinar canario con un 61% la especie vegetal predominante en los montes canarios.

El borrador del Plan Forestal del Ejecutivo canario contiene dos alternativas de actuación, una más conservadora y otra centrada en la gestión forestal sostenible activa. Las dos, viables y las dos cumplen con los criterios de sostenibilidad, pero el Gobierno se muestra en el documento a favor de la segunda opción, que además de la conservación del sector forestal apuesta por otros aspectos como el desarrollo económico.

Zapata: «La gestión se hará de la mano de los cabildos y las administraciones municipales»

«La alternativa 1 cumple los criterios técnicos, pero no es suficiente para la realidad del sector forestal de Canarias y de los bosques, y se apuesta firmemente por la alternativa 2, donde los objetivos se equilibran entre la conservación de los ecosistemas forestales, el desarrollo económico y empresarial ligado al sector forestal y una gobernanza que tiene en cuenta la realidad del Archipiélago», añade el Gobierno en el plan.

Además del Plan Forestal de Canarias, el Gobierno regional tiene otras dos acciones en marcha relacionadas con esta materia. Por un lado, está en proceso la modificación del actual Decreto Ley, por el que se regula la prevención y extinción de incendios forestales en Canarias. Ya está abierto a consulta pública y desde el departamento que dirige Zapata confían en que esté lista en el plazo de seis meses. Y además, se está trabajando para redactar la primera Ley de Montes para Canarias, ya que actualmente no se cuenta con una regulación específica. «Es necesario un marco legal adaptado a la situación de presente y futuro de nuestros montes», apuntó el consejero.