Carnaval 2024

Josué Quevedo: "Hay muchas cosas que corregir, pero el Carnaval en la calle está latente"

El director artístico del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria asegura que las carnestolendas están en camino de renovarse, y ese proceso "se ha notado en la calle"

Josué Quevedo, director artístico del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria 2024.

Josué Quevedo, director artístico del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria 2024. / José Pérez Curbelo

El director artístico del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria, Josué Quevedo, hace balance de esta edición una vez finalizada. Quevedo destaca que el Carnaval en la calle ha renacido. A pesar de que hayan muchos aspectos por corregir, el director considera que lo importante es que algunas tradiciones han regresado como los chirigays, la feria o el ambiente festivo en la calle. Por ahora, Quevedo no sabe si repetirá en el puesto el próximo año.

Su premisa al llegar al puesto era el de renovar la fiesta, ¿cree que lo ha conseguido?

Creo que estamos en el camino, a mí me nombran a finales de agosto, no empiezo a trabajar hasta octubre y desde entonces hasta enero se ha hecho el Carnaval y pienso que estamos en el camino, que se ha nota un poco en el Carnaval de la calle. 

¿Cómo ha visto este año el Carnaval de la calle?

En general se ha vuelto a celebrar cosas que no teníamos como la feria, los chiringays, las calles engalanadas y sobre todo el ambientazo que ha habido en cada una de las noches del Carnaval y en el Carnaval de Día

¿El próximo año renovará como director artístico?

Ahora mismo estoy centrado en el Carnaval de Maspalomas y ya lo que pase el año que viene, al final es cuestión que no depende de mí solo, sino también de la organización, es decir, del Ayuntamiento y Promoción. Ya se verá. 

¿Qué destaca de esta edición del Carnaval?

Sin duda que la gente se ilusionó y quiso estar presente en la calle, creo que el Carnaval no es nada sin la calle y creo que se notó. 

Estará un poco atolondrado entre ambos Carnavales...

El Carnaval de Maspalomas ya es el cuarto año que lo organizo y lo tengo hecho muy a mi mano, es un Carnaval completamente diferente al de Las Palmas de Gran Canaria. Es un Carnaval donde todo el mundo va a pasárselo bien, donde todo el mundo quiere divertirse y es un Carnaval sin presiones porque no hay tantos concursos, no hay concursos de murgas, de comparsas, de disfraces, entonces es un Carnaval en el que la Gala de la Reina y la Gala Drag Queen son las protagonistas por excelencia junto con la Gran Dama y la Infantil. Es un Carnaval que me gusta muchísimo. El de Las Palmas también, pero es verdad que al final teníamos un camino muy complicado, en sí ya era complicado no tener el sitio para el Carnaval. Se hizo algo milagroso que muchos creían que no íbamos a llegar y que no iba a ser posible, al final se hizo de milagro y se pudo celebrar el Carnaval. Vuelvo y repito, me quedo con lo positivo y eso es que la calle vuelve a estar viva, que hay muchas cosas que corregir lógicamente, pero la calle está latente y está presente. 

¿A qué se refiere con que se hizo de milagro?

Me refiero a eso a que mucha gente no confió en que el proyecto fuera a salir y al final salió. 

Si el próximo año finalmente vuelve a ser el director artístico, ¿haría algo diferente?

Haría tantas cosas, así que lógicamente sí. Pero repito no solamente depende de lo que yo haría, sino de la organización que también quiera porque esto es un trabajo en equipo está claro que seguiríamos mejorando. Ya este año ha habido un porcentaje de un camino que tenemos que seguir que es recuperar el Carnaval y demás y a partir de ahí seguir avanzando. Es cierto que hay errores, claro que sí, pero también muchísimos aciertos, más que errores. 

¿Hay algo en particular que el próximo año haría diferente?

No te lo voy a comentar porque no creo que sea el momento de decir qué haría el año que viene, es el momento de hacer un balance en positivo, corregir esos pequeños errores y hacer un balance positivo de que el Carnaval vuelve a estar en la calle. 

La alegoría del próximo año son las Olimpiadas, ¿qué la parece el tema?

A mí me gustaba entre otros los Juegos Olímpicos porque da mucho pie a la imaginación, hay muchas cosas de las que disfrazarse y sobre todo porque son disfraces que no hace falta tanta economía, no es un Carnaval como el de Venecia o el de París, que siempre es algo más elitista. Este Carnaval todo el mundo puede disfrazarse de ciclista, futbolista, de jugador de baloncesto, y un sinfín de opciones. 

¿Echó de menos el Parque Santa Catalina?

Sigo pensando que estamos equivocados con que si el lugar es el idóneo o no, lo que es idóneo es que salgamos a la calle y que esté presente independientemente del sitio en el que el Carnaval esté. El Carnaval ha pasado por varios lugares y no ha pasado nada, el Carnaval sigue existiendo, sigue latiendo y sigue viviéndose en la calle. Independientemente de si me gusta más, claro que me gustaría estar en el Parque en el escenario principal, pero creo que las noches de Carnaval y día la zona del Mercado del Puerto, la plaza de la Naval y tirando hacia el Parque podría ser una buena zona para disfrutar de la fiesta en la calle. 

¿Cómo ha compaginado las quejas de algunos vecinos de La Isleta?

Yo soy de La Isleta y es verdad que hay unos cuantos vecinos que están en contra y lo entiendo porque muchos de ellos tienen sus casas justo al lado del recinto y lo puedo entender, pero la gran mayoría de los vecinos están contentos. La Isleta son 22.000 personas, si no recuerdo mal, y creo que firmas hay como unas 400 o 500. Con esto no quiero decir que no tengan razón, tienen su punto y lo entiendo perfectamente. 

¿Pase por donde pase el Carnaval acarreará quejas vecinales?

Sí porque al final a todo el mundo le molesta y tiene miedo de lo que pueda suceder si está cerca de su casa. El Carnaval es una fiesta con algo de polémica y allá donde está sucederán este tipo de quejas, me gusta mirar lo positivo y creo que lo positivo es la convocatoria en la calle. 

¿Cómo ha gestionado las críticas?

Las gestiono muy bien siempre y cuando sean constructivas. Lo que no me gusta son las destructivas, pero no porque me hagan mal a mí sino porque hacen mal al Carnaval y es lo que digo siempre si quieres que el Carnaval crezca lo que tenemos que hacer es hablar tranquilamente en privado de las cosas que tenemos que corregir, porque si todos vamos a apuntar a brutos en todo momento al final nos estamos equivocando porque empaña la imagen del Carnaval. Los políticos van y vienen, yo, que soy el director ahora voy y vengo, pero la mancha del Carnaval queda siempre, y es ahí donde está el problema. Se pueden hacer críticas constructivas, pero se pueden hacer en privado sin ningún tipo de problemas e intentas mejorarlas. Si hay una crítica constructiva bienvenida sea. Ahora, las destructivas lógicamente no porque vuelvo y repito no hacen bien a nadie, lo que hacen es perjudicar al Carnaval.