De gira por España con el Alba Berlín, su primer destino fuera de España en los 50 años que lleva vinculado al baloncesto. ¿Ha logrado ya imprimir su particular sello al equipo?
Estamos en ello. Todavía nos encontramos en fase de preparación. En estos momentos tenemos a dos jugadores alemanes lesionados, al lituano Marius Grigonis en el Eurobasket hasta el pasado sábado jugando con Lituania, y a Spencer Butterfield que sí se ha entrenado con nosotros pero anda con problemas de tobillo. Así que hemos tenido que afrontar los encuentros que hemos disputado hasta el momento en España con chavales muy jovencitos, y los hemos perdido por paliza, aunque eran contra rivales potentes como el Unicaja de Málaga (91-62) y el Real Madrid (79-51).
Y esta tarde le toca reencontrase con el Herbalife Gran Canaria en Puertollano. ¿Un partido especial en lo personal?
No. Eso sí, me encantará saludar a toda la gente del club con la que coincidí en mis dos temporadas en la Isla. Pero aparte de eso, el objetivo fundamental de este encuentro es continuar con nuestra preparación de pretemporada. Si tenemos en cuenta que, por lo comentado anteriormente, no tenemos a diez jugadores séniors disponibles, mejor enfrentarnos al Herbalife Gran Canaria que hacerlo entre nosotros.
Como hombre de baloncesto, y por su pasado en el club grancanario, supongo que siguió las evoluciones del Granca en la primera temporada post Aíto. ¿Qué le pareció el rendimiento del equipo con Luis Casimiro en el banquillo la campaña anterior?
Creo que hizo una buena temporada, continuando la línea marcada en los últimos años. Sin duda, es para que la gente esté contenta en Gran Canaria con lo que ha hecho su equipo.
Además se conseguía el primer título en la historia del club claretiano con la Supercopa obtenida en Vitoria...
Más allá de los títulos, que son importantes, el objetivo del Granca es y debe seguir siendo el estar ahí, entre los equipos importantes. Quiero decir entrar en los playoffs por el título, meterse en la fase final de la Copa del Rey y llegar a las rondas decisivas de la Eurocup. Y todo eso se consiguió. Eso es algo muy difícil de conseguir.
¿Reconoce en este Herbalife Gran Canaria algo del estilo de Aíto García Reneses?
Seguramente sí. Aunque hay algunos jugadores que ya no están, los que permanecen de mi etapa siguen utilizando aspectos del juego que desarrollaron conmigo. En mi caso, también me aproveché de cosas de Pedro Martínez -técnico al que sustituyó en el banquillo del conjunto amarillo-, de las cosas buenas que los jugadores adquirieron con él para luego continuar ampliándolas.
Ya reconoció Luis Casimiro nada más aterrizar el verano pasado en el banquillo amarillo, que iba aprovecharse en algunos aspectos del trabajo realizado anteriormente por Aíto García Reneses. Es algo hasta cierto punto lógico.
Sí, no sólo porque se le da continuidad al trabajo, sino porque son conceptos buenos para mejorar cada día. Otra cosa son los conceptos tácticos que te sirven para un momento determinado, pero que pueden ser contraproducentes si sólo te fías de ellos para la progresión del equipo.
Hablando ya de la nueva temporada, ¿qué le parece la plantilla que ha confeccionado el Herbalife Gran Canaria para este ejercicio 2017-18?
La verdad es que no conozco de nada a algunos de los jugadores que se han fichado, pero estoy convencido de que funcionarán bien en el engranaje del equipo, como viene sucediendo habitualmente.
¿Cómo está resultando la vuelta a los banquillos de Aíto en Berlín después de tomarse un año sabático?
Estamos aún en una etapa de preparación. Todavía no se puede decir que he vuelto a los banquillos, sino que estoy en una etapa de prebanquillo -risas-. Pero bien, me encuentro muy a gusto, con muchas ganas de intentar enseñar todo lo que buenamente pueda.
¿El estar un año parado se nota mucho en el caso de un entrenador cuando retoma de nuevo la rutina de la competición, viajes y entrenamientos?
Se nota, pero de forma positiva. Después de pasarte una temporada en blanco, tienes más mono de baloncesto y te ves con más fuerzas si cabe para entrenar.
En el Alba Berlín trabaja codo con codo con dos grancanarios. Himar Ojeda, director deportivo, e Israel González, uno de sus asistentes con el que ya trabajó en su etapa en el Herbalife Gran Canaria. ¿Eso ayuda cuando uno afronta una nueva etapa en otro país ?
Sobre todo en el caso de Israel, porque ya conoce mi concepción del baloncesto después de las dos temporadas que estuvimos juntos en el Granca. Es más fácil para mí tener una persona como él que empezar de cero con un nuevo ayudante que a veces tarda tiempo en asimilar esa forma de ver el juego.
¿La figura de Himar Ojeda resultó importante en su decisión de aceptar la oferta del Alba Berlín y volver a los banquillos?
No, porque nunca hasta ahora había trabajado con él. Sí lo conocía como rival, cuando estaba de ayudante en el Granca, o de compartir algún clinic. Quizás sea al revés. O sea, que Himar Ojeda fuese el director deportivo resultó importante para que el club se fijara en mí. Eso sí, estoy encantado de que desempeñe esa función aquí.
¿Añora aquellas excursiones por la Isla, aquellos paseos realizando fotografías -una de sus pasiones- de la naturaleza?
Cuando tenga la ocasión de dejar de entrenar, dentro de diez o doce años, ya me daré mis paseitos por allí otra vez.