Tres finales en el calendario claretiano. El Granca se mueve en el alambre de la clasificación copera, un torneo al que no asiste en las tres últimas ediciones y por el que no hace más de un mes se daba prácticamente por hecho que regresaría esta temporada. Las cuatro derrotas consecutivas en la Liga Endesa han dejado al equipo amarillo en una situación delicada, pero todavía está a tiempo de enmender sus errores.
UCAM Murcia, Valencia Basket y Monbus Obradoiro. Tres partidos que tiene que afrontar el conjunto dirigido por Porfirio Fisac bajo la frase que el entrenador de fútbol Luis Aragonés hizo famosa durante una de sus intervenciones: «Ganar, ganar y volver a ganar –hubo más repeticiones del verbo triunfante–».
Si suma las tres victorias en las tres citas que tiene el Granca antes de alcanzar el ecuador de la primer vuelta liguera, las opciones de que la escuadra claretiana esté presente en el torneo del KO que se celebrará en Granada en febrero –del 17 al 20– son prácticamente factibles, pues con el balance actual de victorias-derrotas del Granca, 7-7, le facilitaría su clasificación copera.
Nunca un equipo con diez triunfos se ha quedado fuera de la Copa del Rey. Para conseguir el pase copero, la media de triunfos se marca en las nueve victorias. Una cifra que pueden alcanzar perfectamente los claretianos, pero en el que entraría en juego el factor del basket-average para desempatar con otros equipos implicados con igual balance numérico. El del Granca ahora está fijado en -20.
Así pues, el resultado de los tres partidos se presentan clave para regresar a la Copa, pues los enfrentamientos con el UCAM Murcia, en el Arena, (lunes 27, 20.30 horas) y el Valencia, en La Fonteta, (lunes 3 de enero, 20.30 horas) son ante dos rivales directos por concluir dentro de los ocho primeros clasificados al término de la decimoséptima jornada.
El conjunto de Sito Alonso actualmente es quinto, con ocho triunfos y seis derrotas; mientras que los valencianos, a los que el Granca ya les ganó en su pista en la Eurocup, son novenos, un puesto por encima de los insulares, gracias a sus siete triunfos y seis derrotas. A la espera de resolver un partido aplazado con el Obradoiro (jueves 23).
Antecedentes coperos
Teniendo en cuenta la marca de triunfos con los que se clasifican los equipos para la Copa durante la última década, sumar dos victorias más se antojan necesarias tal y como se está comportando la Liga Endesa esta temporada.
Es verdad que han existido dos ediciones desde el 2010 en los que los agraciados coperos se metieron en el torneo del KO con un balance negativo de 8-9.
El primer caso ocurrió en 2012, cuando el Gipuzkoa certificó su pase gracias al average. Con un registro de 42 puntos a favor, el conjunto vasco adelantó en la tabla al Valencia (+5), Bilbao Basket (+1), CAI Zaragoza (-12) y Assignia Manresa (-21). En esa edición de Barcelona el Granca no estuvo presente, una temporada de amargo recuerdo en la que se terminó luchando por la salvación.
El segundo año en el que un equipo entró con un balance negativo –sin tener en cuenta a los que han jugado como anfitrión– fue en 2016. Por entonces el Unicaja se metió en la Copa con 8-9 y un average de +48, empatado con el Andorra a triunfos, pero aventajándole en el desempate en 60 puntos (-12 de los del Principado).
Cuestión a resaltar también reside en la edición de la temporada 2019-20, la última en la que el Granca tuvo opciones reales de luchar por clasificarse desde que no la compita desde el 2018. En el año de Fotis Katsikaris como entrenador, el pelotón de equipos empatados con nueve triunfos y ocho derrotas alcanzó desde el sexto clasificado, el Valencia (+119), hasta el noveno, el Unicaja, que compitió por el trofeo gracias a su condición de organizador. El séptimo fue el Andorra (+19) y octavo el San Pablo Burgos (+12), que no pudo jugarla en detrimento del conjunto malagueño.
Con estos precedentes, queda claro que tener un basket average positivo se presenta imprescindible para poder estar en Granada en febrero. Las rutas coperas pasan por el «Ganar, ganar y volver a ganar» para evitar desempates; o ganar y ganar, pero por muchos puntos para revertir los -20 que tiene ahora el Granca. Porque con solo un triunfo hasta la jornada 17, las opciones son nulas.
