A golpe de tambores y bailes la villa de Ingenio acoge desde el jueves el XVI Festival Internacional de Folklore, 'Muestra solidaria de los pueblos'. Ayer comenzaron las actividades con juegos típicos de las islas. En el centro del club de lucha Maninidra, rusos, franceses, senegaleses, noruegos y murcianos un encuentro en 'la tercera fase' con uno de los deportes con mayor tradición en Canarias, la luchada.

La cita multicultural, comenzó con la pega. Mientras los luchadores de los diferentes países desfilaban decididos hacia la arena, un conjunto de Senegal con sus timbales amenizaban las luchas entre los diferentes participantes. El público sonreía encantado al ver la visión que cada rival tenía de esta disciplina canaria. Si un chico de Senegal se agarraba a otro como si de una araña se tratara para no ser derribado, los rusos utilizaban su refinada técnica para no sucumbir ante su adversario. Incluso algunas de las mujeres presentes, al ritmo de la música, rodearon la pista con palmas, saltos y los brazos en alto. El público, entregado, no dejó de aplaudir ni un segundo. Ni siquiera cuando Blas Sánchez interpretó Mañanas de mi pueblo, el himno del festival, del que es también compositor.

A continuación, el jolgorio se trasladó a unos pocos metros de la escultura en homenaje a Juan Hernández Ortega, más conocido como el pollo de las calabazas. En la plaza, los organizadores improvisaron un escenario donde también la música tuvo importancia capital. Rusia, con un gigantesco 'timple' triangular, que no es otra cosa que una balalaika, Francia y Senegal; en este orden, cada uno de los grupos organizó y aleccionó a los participantes de las canciones y bailes típicos de su lugar de origen.

El evento tiene el respaldo del Comité Internacional de Festivales de Folklore (CIOFF). "El festival de Ingenio es el único de estas características que se celebra en Canarias, con un total de 19 a nivel de España. Participan en él más de cien países. Es, ante todo, una garantía de calidad", sentencia Francisco Fanego, representante y observador de dicho comité.

Ingenio puede sentir el orgullo de representar durante unos días al folclore internacional.