"Me interesa acciones que interrumpen la vida cotidiana". De esta manera resume el artista salmantino Alberto García, que desde anoche celebra la puesta de largo en La Regenta de su primera exposición titulada Lo que no son cuentas son cuentos. Una expresión del negocio bancario que García utiliza para fabular un relato y reflexión sobre lo materia, la relación simbólica del dinero y el intercambio.
La muestra, que se mantiene abierta al público hasta el 23 de octubre, da continuidad al programa Apuestas que inauguró hace dos años el fotógrafo herreño Alexis W con La ventana indiscreta, y en ella se presentan piezas en vídeo, fotografías e instalaciones en las que García ha venido trabajando en los dos últimos años.
Esta "apuesta por el arte emergente" que favorece a un artista que participó hace unos tres años de la promoción de creadores a los que se le cedieron espacios de trabajo en La Regenta, "es un riesgo", según reconocía ayer Alejandro Vitaubet, director de La Regenta, aunque su huella en varias colectivas ha sido determinante para brindarle el espacio.
La muestra se hace en colaboración con el centro de arte salmantino Da2, a donde viajará la obra de García en junio de 2012, y La Regenta traerá igualmente en noviembre próximo una exposición del fotógrafo Roland Fisher.
En cuanto a García, el salmantino ha jugado a trasponer las letras del centro de arte para extraer expresiones como Entrega y Argenta, que saludan al visitante como iconos de los conceptos de intercambio y dinero, cuestión ésta última que había trabajado en piezas como Taxi gratis. En dos plantas de la sala cuelgan vídeos y fotografías accidentales, una cama elástica como gesto de bienvenida y camisetas de regalo.
