El artista tinerfeño Adrián Alemán inaugura hoy viernes, a las 20.30 horas, en la sala San Antonio Abad del Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM), la exposición Socius II, proyecto en el que construye su "metáfora de la isla" con una revisión de la historia a partir del paisaje, su observación y captura fotográfica. Doce piezas en distintas dimensiones con las que Alemán desarrolla , completa y cierra la serie Socius, que exhibió el pasado año en la Sala de Arte Contemporáneo de la capital tinerfeña.
La muestra, que permanecerá en este espacio hasta el 17 de febrero de 2013, llega a San Antonio Abad en una colaboración con el Gobierno canario que en 2012 se materializó con una exposición de Laura González, y abre además un nuevo ciclo denominado Escribanías. Un término que tal como explicó ayer el director del CAAM, Omar-Pascual Castillo, hace referencia "a esta tendencia neoconceptual de la casi no se hablado y que me interesaba rescatarla". Esto es, "las relaciones que tenemos con las imágenes y cómo dotamos a esas imágenes de un silencio o de un contenido". En el caso de la obra de Alemán, según Castillo, "uno de los artistas conceptuales más importantes de Canarias y representante destacado de la generación española de los 90 hasta ahora aunque él no lo reconoce, señaliza un contenido oculto en la imagen que debería ponerse al descubierto".
El diseño museográfico de Socious II permite al espectador descubrir en la planta baja de San Antonio Abad el proceso de creación en un mural del que cuelgan numerosas fotografías fijas sobre el mismo horizonte marino, en aguas de Tenerife, y en la planta alta completar el recorrido con el resto de piezas y las instantáneas tomadas en el Puerto de la Luz.
"El CAAM me ha dado la oportunidad de revisar un proyecto, que nunca se logra comunicar cuando tienes que cumplir con unos plazos, le comenté al director mis frustraciones y mis dudas, y he podido acercarme de nuevo, y creo que hemos ido más allá", explica Adrián Alemán. Un artista que se declara fascinado por "el paisaje y el territorio, lo social y lo colectivo" y "obsesionado con una imagen de la isla", concepto en el que profundiza en esta exposición. Alemán apuesta por dar una vuelta de tuerca al imaginario plástico de la isla y ha focalizado su objetivo en "el gesto de mirar fuera de la isla, mirar al mar, descubrir una especie de reflejo, con unos barcos que me enviaban la imagen de vuelta, como una metáfora de la propia isla".
"Verdad dolorosa"
La historia se entrelaza con lo contemporáneo para ambientar este particular "salón náutico" en aguas de las dos islas capitalinas. De un lado, las fotografías tomadas desde el mismo sitio durante dos años en la fosa de San Andrés, un lugar que oculta una verdad dolorosa para la imagen de la Isla, donde fueron asesinadas unas 1.600 personas, represaliadas durante la Guerra Civil". Una "imagen incisiva sobre un mar de cadáveres" que se construye sobre lo que el artista denomina "la metáfora por excelencia de la burguesía, del capitalismo, con barcos sobre horizontes sublimes expandiendo el capitalismo hasta los confines del mundo, el modelo de colonialismo a la inglesa".
Y ese poso histórico llevó a Adrián Alemán a trabar una relación con estampas portuarias en la capital grancanaria en una progresión hasta la II Guerra Mundial. El Puerto de la Luz con el edificio Woermann que "emerge como icono renovado donde se asistió a submarinos nazis, y siempre ha formado parte de la ciudad", subraya Alemán.
Dice el tinerfeño que de manera alguna se planteó esta serie como un "acto de memoria", sino que lo hizo, parafraseando a Walter Benjamin, porque "para pensar nuestra colectividad es necesario repensar al pasado, poner en valor el pasado para poder construir nuestro presente".
