"Si las cartas de Galdós a Pardo Bazán existieran aún, ya habrían aparecido"

Isabel Parreño (IP): La escritora aparece como una mujer apasionada de la vida, cariñosa, muy inteligente y con un sentido de humor chispeante. Por los testimonios de quienes conocieron a Galdós, sabemos que era un hombre reservado, que no gustaba de airear sus intimidades personales y lo único que podemos intuir, más que afirmar, de la lectura de estas cartas, es que ambos se profesaron un gran respeto, que la pasión amorosa fue mutua y que aún en los momentos de más distanciamiento mantuvieron una entrañable amistad y colaboraron literariamente.

¿Hay esperanzas de que aparezcan las cartas de Galdós?

Juanma Hernández (JH): Hay muchos expertos en Galdós que trabajan en todo el legado del escritor, y en la Casa Museo se conserva un fondo epistolar enorme e intersantísimo. Siendo así, creemos que si esas cartas existieran aún, ya habrían aparecido, pero sería una sorpresa tremendamente agradable dar con ellas y poder completar así Miquiño mío con la visión de ambos escritores.

¿Era real su misoginia?

IP: De la lectura de las cartas no podemos extraer ninguna conclusión sobre la relación general de Galdós con las mujeres. Su relación con doña Emilia fue siempre impecable desde el punto de vista del respeto intelectual y la admiración personal. Siempre alentó los esfuerzos y la lucha de Pardo Bazán por equiparar los derechos de las mujeres a los de los hombres. Un buen ejemplo de ello es el apoyo brindado por Galdós a la incorporación de candidaturas femeninas a la Real Academia.

De la única carta que se conserva de Galdós a Pardo Bazán, ¿qué se deduce?

JH: No demasiado, puesto que es una carta en la que el escritor canario agradece el apoyo de Emilia a una fiesta homenaje que le prepararon en Madrid, y organizada en una época temprana en la que los dos escritores mantenían sólo una relación de mutuo respeto y admiración. No obstante, es interesante ver que ya en ese momento, 1883, Galdós conocía la obra de Emilia Pardo Bazán y mostraba un gran interés hacia la dama y escritor que para él era.

¿Cómo se explica que no aparezcan las cartas de Galdós a Pardo Bazán y sí las de Galdós a Teodora Gandarias?

IP: Si tenemos en cuenta que fueron escritas en épocas diferentes -la relación con Teodora Gandarias fue al final de su vida- y dirigidas a personas diferentes, es fácil pensar que el destino de las misivas también fuese diferente. Es muy posible que las cartas de Galdós a Pardo Bazán se hayan perdido. Todos los indicios de nuestras investigaciones apuntan en ese sentido. El domicilio de la escritora fue saqueado durante la guerra y hay testimonios de que abundante documentación, como cartas, diarios personales, etc, fue quemada por la familia del dictador Franco al tomar posesión del Pazo de Meirás, antigua propiedad de los Pardo Bazán. Aún así, es imposible determinar con exactitud el destino final de esas cartas.

¿Qué ha sido lo más curioso que encontraron en las cartas?

IP: Los matices de una relación muy especial, inusual para la época y nos acercan, a través de las palabras de Pardo Bazán, más al ser humano que al intelectual.

¿Cuáles son las cartas más relevantes que se conservan en la Casa-Museo Pérez Galdós?

JH: Se conservan 46 cartas están todas escritas por Emilia Pardo Bazán, aunque en alguna escriben algún párrafo sus hijos. En general, son las cartas menos íntimas, mientras que las 38 publicadas por Carmen Bravo-Villasante en 1975 son, también en general, las más íntimas. No obstante, poseen un gran valor porque también las cartas más formales contienen elementos muy interesantes del pensamiento de Emilia Pardo Bazán e, indirectamente, del propio Galdós, así como del intercambio intelectual y literario que mantuvieron.

¿Cómo trata Pardo Bazán a Galdós en sus cartas?

JH: Depende del periodo al que nos refiramos. En los inicios, Emilia Pardo Bazán se dirige a él con extremado respeto, demostrándole una admiración sin fisuras y considerándolo el mejor escritor del momento en España. En un segundo momento, cuando mantienen la relación amorosa, Pardo Bazán trata a Galdós con una infinita ternura, mostrando un amor entero sin olvidar nunca ese intercambio intelectual y literario que mencionábamos antes. Por último, esta ternura, con algo más de distancia respetuosa, se mantiene en las cartas posteriores a la relación amorosa, interesándose Pardo Bazán mucho por la salud del escritor, por los detalles de su actividad creativa y por su situación personal y económica.

¿Y qué puede contarnos sobre esta edición de Turner?

JH: La edición recoge por primera vez todo el epistolario conocido entre los dos escritores. Lo hemos datado y ordenado cronológicamente para ofrecer una idea lo más fiel posible de la relación entre ellos. Además, incluye reproducciones de manuscritos, algunas inéditas hasta el momento, que son una maravilla.

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