La segunda planta del centro sociosanitario de El Pino se llenó ayer con las melodías de la Orquesta Sinfónica de Chicago. En el marco de su programa Música Ciudadana, un quinteto de cuerdas compuesto por dos violines, una viola, un violonchelo y un contrabajo se desplazó al centro para ofrecer un emocionante concierto para pacientes y usuarios de El Pino, Taliarte, El Sabinal, Santa Brígida y Ferminita Suárez.

Se trata de una iniciativa que la Orquesta de Chicago incorpora al 30º Festival de Música de Canarias, con el objetivo de llevar la música a sectores de la sociedad en situación de dependencia: "Es una tradición que comenzó hace 90 años en Chicago, pero hace tres años que la incorporamos a nuestras giras porque nos dimos cuenta de que es algo especial y los músicos aman hacerlo", señaló Deborah Rutter, presidenta de la Orquesta, que acudió al acto. Así lo manifestó también Dan Armstrong, contrabajo del quinteto: "Le otorga a la música un gran significado".

Sin trajes de galas ni formalismos, el concierto arrancó con los tres movimientos del Divertimento K. 136 de Mozart ante un salón de actos repleto de personas. La actuación estuvo guiada por la voz de Ricardo Ducatenzeiler, miembro de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria y presidente de la Asociación Presencia de la Música, cuyo objetivo también es trasladar la música a centros de estas características, como hogares de acogida, prisiones o centros de educación especial. Desde Fritz Kreisler hasta Bach, Ducatenzeiler introdujo los temas del repertorio del quinteto, intercalados con solos de cada instrumento, para dar a conocer a los pacientes los diferentes sonidos de las cuerdas. "Esto es una maravilla, un sueño hecho realidad", manifestó Isabel López, de 80 años, residente de El Pino desde hace tres meses, "ya conocía a la Orquesta de Chicago y pero poder verla hoy aquí es un regalo". El Concierto de Bradenburgo nº3 de Bach puso el broche de oro a una hora y cuarto llena de música y de ternura. "Gracias por venir, no lo vamos a olvidar", se despidió Isabel.