Juanjo Sáenz ya demostró la idoneidad del cómic para demostrar la trascendencia de las manifestaciones del espíritu humano en El arte. Eso mismo lo ratifica El secreto del Salmo 46 que adapta el texto de una conferencia del diseñador de videojuegos Brian Moriarty que luego se convirtió en una obra de teatro. Con un dibujo muy esquemático y austero, la obra empieza con su trabajo en una tienda de informática y la aparición de un libro que desvela la clave de un tesoro en un pequeño collar provocando la algarabía generalizada. Desde ese momento, Moriarty se obsesiona por los extraños secretos que guardan las grandes obras de la humanidad. Bach, Shakespeare o incluso la Biblia, son meticulosamente analizados en un trabajo que encantará a los fanáticos de Cuarto Milenio o la revista Más allá.