Shigero Mizuki aborda la figura de Adolf Hitler desde la psique del Führer y su destino divino. Con multitud de dibujos basados en fotografías reales, el autor nipón compone láminas en las que los personajes aparecen en forma de trapecios, para a continuación narrar la vida del dictador a modo una composición ortogonal. Otra aproximación a la vida del genocida, sin juzgarlo, y desde sus humildes orígenes hasta su final.