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El optimismo del superviviente

Wilko Johnson regresa a la actualidad, con un disco de puro rhythm and blues, tras superar un cáncer de páncreas que le diagnosticaron hace 4 años

Wilko Johnson (a la izquierda) con su grupo en directo. LP / DLP

El continuo goteo de fallecimientos de estrellas del rock durante los últimos años ha provocado cierto desaliento entre los aficionados que han comprobado cómo los estupefacientes por un lado, y las enfermedades por el otro, se llevaban en poco tiempo a nombres tan determinantes como Chuck Berry, Louy Reed o David Bowie. Pero también hay historias esperanzadoras que narran todo lo contrario. Y una de ellas es, precisamente, la de Wilko Johnson que ha logrado sobrevivir nada menos que a un cáncer de páncreas que le diagnosticaron hace un año y que muchos medios anunciaron como mortal.

El padre del pub rock regresa a la actividad, además, con uno de los mejores discos de su carrera. Por que este Blow your mind, contiene todas las características que resume una trayectoria fiel al mejor rhythm and blues surgido a principios de los setenta en el Reino Unido. Un estilo en el que su exbanda, Dr Feelgood, junto con Bishops y Eddie and The Hot Rods, fue la mejor exponente de dicho género con una discografía sin desperdicio, pero que resulta imprescindible precisamente durante los tres primeros discos en los que estuvo Johnson hasta el año 1977.

En lo referente a su carrera en solitario, el músico de Essex ha producido diez trabajos en cuatro décadas, fiel a los cánones del estilo con el que comenzó su carrera. Y eso sucede con este último trabajo en el que está su fiel lugarteniente, el bajista Norman Watt Roy y el batería Dylan Howe, en un trabajo producido por el experto en estos sonidos Dave Eringa. Cuatro años después de su anterior trabajo, el que fuera una colaboración con Roger Daltrey de The Who, Johnson muestra su experiencia en la enfermedad en temas como Marijuana y Take it easy que, a pesar de su temática deprimente, desprenden optimismo por los cuatro costados ya que, junto a las otras diez piezas del disco, son un auténtico manual de cómo trasladar a 2018 el rock primigenio de los años 60. De entrada, un tema como el que titula el disco, al igual que joyas como Tell me one more thing, remiten directamente a grandes álbumes clásicos de su exgrupo como Down by the jetty o Malpractice. Así, y por poner un ejemplo, That's the way I love you repite la misma secuencia de Roxette. Para finalizar, nada mejor que recordar la histórica visita que Johnson realizó a Las Palmas de Gran Canaria en los años noventa, acompañado además por Watt Ryo, en la que ofreció un concierto en el pub La Calle sin parangón hasta ahora.

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