Su nuevo disco, Al chile,
Al Chile es un tributo a ese fruto de la tierra y a la gran variedad de platillos que nosotros cocinamos en México, pero también reivindica que hay que hablar las cosas de forma directa, porque para nosotros es difícil. En el norte de nuestro país sí se habla más al grano pero, en el sur, siempre andamos con rodeos. Por eso, musicalmente, Al Chile es una combinacion de los estilos que se manejan en el norte y en el sur de México.
El foco de las letras se dirige a las condiciones infrahumanas que sufren los inmigrantes al cruzar la frontera mexicana hacia EE.UU., ¿cree que nos encaminemos hacia un horizonte menos tolerante, más racista, a ambos lados del Atlántico?
Pues ojalá que no. Yo creo que las cosas van cambiando, aunque nos preocupa ver a gente que tantos refugiados se siguen uniendo para huir de la violencia, como sucede en Latinoamérica y África. Yo creo que ya le toca a nuestros gobiernos investigar con especialistas sobre qué proyectos se pueden hacer para ayudar a estas personas. Y por mi parte, como cantante, creo que me corresponde cantar el tema para verlo desde un punto de vista más humano.
Más que un disco nacido del corazón, afirma que este es un álbum "de cintura para abajo". ¿Es un disco para el disfrute, aun con su carácter reivindicativo?
Creo que sí. Este es un disco que habla del gran milagro que sucede cuando todos nos juntamos para crear una fiesta, porque la fiesta es el gran ejemplo de unión del ser humano.
¿Diría que este álbum profundiza en su ambición de rendir homenaje a su identidad oaxequeña y mixteca y, a un tiempo, difundir la riqueza de México?
En parte me interesa difundir la riqueza cultural del sur, y de México en general, y disfruto mucho conociendo y aprendiendo sobre generos musicales que no conozco, como las bandas del chile frito, de las que deriva este proyecto, que son unas bandas del estado de Oaxaca. Y también deseo dar a conocer la música que a mí me encanta y que, en algunos temas, proviene de Colombia, porque tenemos un gran intercambio de música y la cumbia se adopta por cada país latinoamericano, que lo hace a su manera.
Uno de sus signos es adueñarse de otras canciones y versionarlas desde su terreno. Al chile
La migración ha sido un tema importante para mí desde que empecé como cantante. En ese inicio compuse el tema Ofrenda, que habla de los migrantes de mi etnia mixteca, que migran del sur a EE.UU. Creo que es importante dedicarle uno o dos temas ,o a veces, el disco completo, como hice en el disco La línea (2001) a esta realidad. Manu Chao compuso Clandestino hace 20 años y quise rescatarlo desde la perspectiva de una mujer, porque ahora hay más mujeres y más niños migrando.
Dice que a menudo se tilda de "peligrosas" a las mujeres fuertes. ¿Cree que esto ha cambiado con las movilizaciones feministas en el último año?
Más bien nos ven como peligrosas a las mujeres que organizamos o unimos a las mujeres. Y eso debe ir cambiando porque no es un reto, ni una afrenta, sino una petición de equidad. Esto es importante porque el respeto es esencial para poder vivir; sobre todo, en la lucha contra la violencia hacia las mujeres.