Hace unos días Alberto de Mónaco, que fue el primer royal que dio positivo en covid-19, anunciaba que el Principado estaba preparado para hacer frente a una nueva temporada turística y reaparece con ese fin. Lo hace acompañado por su mujer, Charlene, y sus dos hermanas, Carolina y Estefanía, con motivo de la inauguración de un nuevo casino en el Principado. Al acto acudieron muchos de sus sobrinos, entre ellos Andrea y Pierre Casiraghi.

Entre los grandes ausentes estaban Beatrice Borromeo, esposa de Pierre Casiraghi, y su cuñada Carlota Casiraghi. Mientras, los hijos de Estefanía sí acudieron, todo ellos con mascarillas.