Ingeniosos y curiosos, Álvaro y Mateo Oliva Redondo observan los movimientos de los insectos que merodean en torno a uno de los árboles del parque San Telmo donde también juegan con la tierra que pasa de sus pequeñas manos al parterre y a la inversa en numerosas ocasiones. A escasa distancia su madre, Alicia Redondo, les vigila con un ojo puesto en lo que hacen estos dos hermanos de seis años y el otro en lo que ocurre bajo el escenario. "Que estemos en el parque es completamente accidental porque hemos venido a escuchar la música", señala divertida. Y es que tanto ella como su pareja, Raquel Oliva, han decidido disfrutar en familia del Día Internacional del Piano 176 que ayer se celebró en Las Palmas de Gran Canaria.
Aunque su espíritu inquieto propio de la edad les hace estar entretenidos con lo que les rodea, no han perdido el hilo de lo que han ido a hacer con sus mamás. "Me gusta mucho el piano", explica Mateo después de haber seguido junto a su gemelo el concierto que Luis Sánchez ha dado a media mañana en la plaza Hurtado de Mendoza donde Álvaro cuenta que hasta "los pajaritos cantaban" al son de las teclas. Precisamente mientras narran su experiencia, Sánchez ultima repertorio junto a José Alberto Medina en el parque bajo la atenta mirada de los espectadores. "Es bueno que se hagan este tipo de cosas, siempre y cuando se utilice el sentido común y se mantengan las distancias", observa Oliva sobre la iniciativa que, desde el punto de vista de su mujer, "también es positiva a nivel mental, después de los meses que se ha tenido que estar en casa".
Precisamente fue durante el periodo de confinamiento cuando tuvo lugar la celebración internacional en torno al piano instaurada por el músico Nils Frahm en 2015 en el día 88 del calendario en honor al número de teclas del instrumento, por lo que estaba fijada en el 28 de marzo. No obstante, para no perder este proyecto que arrancó el pasado 2019 en la capital grancanaria, los promotores, Fábrica La Isleta, arropados por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, decidieron multiplicar por dos la cantidad de piezas del teclado para reubicar la actividad en la jornada 176 del año que coincide, justamente, con la festividad de San Juan.
Recuerdo
Esto ha supuesto el nacimiento de un evento que, desde el punto de vista de José Alberto Medina, director de Fábrica La Isleta, "va a quedar en el recuerdo", así como va a contribuir a "posicionar a la ciudad en el panorama cultural internacional dado que no en todos los lugares se ha realizado esta celebración como aquí". Y es que para el Happy Piano Day 176 se han sacado una serie de pianos dobles que profesionales de la talla del propio Medina, Luis Sánchez, Héctor Matacherry, Víctor Naranjo, el dúo Irga González Falero & Ana Marrero, Tania Rodríguez, Gilles Stoppey , así como el solista Óliver Curbelo, el dúo formado por Josué Santana y Lisandro Rodríguez; Rayko León, Cristóbal Montesdeoca, se encargan de tocar en diferentes puntos de la ciudad. De tal forma que desde las 12.00 hasta las 17.00 de la tarde, tienen lugar una veintena de conciertos simultáneos en varios puntos de la capital, concretamente en la plaza Hurtado de Mendoza, Jardines del Atlántico, plaza de Saulo Torón y parque San Telmo.
Es en este último lugar es donde Laura Hernández y Julia Luzardo también disfrutan a media mañana del recital que imparten Medina y Sánchez. Lo hacen de pie porque las 50 sillas que se han colocado para la ocasión, con el fin de que se mantenga la distancia de seguridad recomendada, están completamente llenas. "La verdad es que ha sido un éxito", asegura el director de la productora que promueve la iniciativa, poco antes de que arranque la segunda parte de la programación que se centra en San Telmo y que inaugura Satomi Morimoto con su particular repertorio que va de la clásica a la música popular japonesa.
Le siguen el dúo formado por Sergio Alonso y Natalia Falcón que interpretan una selección de composiciones de Rodney, Piazzolla, Brahms o Falla. Federico Lechner es el encargado de poner el broche final al Happy Piano Day 176, poniendo música en directo a la proyección de dos cortos fundamentales de la historia del cine: The Playhouse y The Boat, ambos de Buster Keaton. Una experiencia "muy emocionante" para el pianista que asegura no haber dudado en cogerse un vuelo desde Madrid para participar en el evento que, además, es el primero que realiza con público desde que se iniciase la crisis sanitaria. "Ser quien clausura este festival es toda una responsabilidad para mí porque habrá muchos compañeros pianistas muy bueno escuchando el recital en el que iré improvisando según la proyección", asevera.
