La escritora mallorquina Maria Antònia Oliver ha muerto este jueves a 75 años.

Nacida en Manacor en 1946, está considerada una de las escritoras más destacadas de la literatura catalana. Entre sus obras, destacan 'El vaixell d’iràs i no tornaràs', 'Figues d’un altre paner', 'Cròniques de la molt anomenada ciutat de Montcarrà', 'Estudi en lila', 'Joana E.' o 'Amor de cans', entre otras.

La primera novela que publicó en 1970 fue 'Cròniques d'un mig estiu', cuando tenía 23 años, y desde entonces escribió novelas, cuentos, teatro, artículos, traducciones y guiones para cine. Oliver se ha hecho en su hueco en el mundo literario y ha llegado a un gran número de lectores tanto en Mallorca y Cataluña como en Europa y en Estados Unidos con las traducciones de sus obras.

Maria Antònia Oliver formó parte del colectivo Ofèlia Drachs y estuvo casada con el también escritor Jaume Fuster. Juntos formaron parte de la llamada 'Generación literaria de los setenta', junto con a figuras como Maria Aurèlia Capmany, Montserrat Roig, Maria Mercè Marçal y Carme Riera. Según determina la AELC, esta generación "se propuso desempeñar un papel relevante y líder en la literatura catalana del momento".

A lo largo de la carrera, Oliver practicó diversidad de géneros y sus obras fueron traducidas al inglés, francés, italiano, español, alemán o portugués. También tradujo al catalán autores como Virginia Woolf, Jules Verne, Mark Twain, Robert Louis Stevenson o Herman Melville.

Es la creadora de Lònia Guiula primera detective de la novela negra catalana, que sería protagonista de sus obras 'Estudi en lila', 'Antípodes' y 'El sol que fa l'ànec'.

Tras 30 años residiendo en Barcelona, Oliver regresó a Mallorca hace unos 25 años y se estableció en Biniali. En la isla inicio un largo periodo de silencio literario tras varios golpes vitales: un trasplante de corazón en 1997 y la muerte, al año siguiente, de su compañero durante tres décadas, Jaume Fuster.

La autora fue reconocida como socia de honor de la Asociación de Escritores en Lengua Catalana (AELC). En el año 2003 recibió el premio Ramon Llull del Govern Balear y en 2007 la Creu de Sant Jordi de la Generalitat de Cataluña. En 2016 fue distinguida con el Premio de Honor de las Letras Catalanas, otorgado por Òmnium Cultural.

El pasado mes de diciembre fue homenajeada en el Teatre Mar i Terra de Palma con motivo de su 75 aniversario.