El paso del tiempo, las relaciones personales y sobre todo... el mar y el horizonte. Estas son algunas de las ideas o temáticas que subyacen en los más de 70 poemas que se incluyen en el libro Los alquimistas del Atlántico, una antología sobre poesía canaria que agrupa a siete autores vivos de las Islas y que se ha publicado en exclusiva para Eslovaquia y Hungría.

El responsable de la obra es el traductor y diplomático eslovaco Peter Zsoldos que este martes ofrecerá la conferencia Recepción de la poesía canaria en Europa Central, a las 18.00 horas, en la sala Manuel Padorno de la Biblioteca Pública del Estado en un acto promovido por la sociedad Slovak Arts Council, y apoyada y organizada por la Nueva Asociación Canaria de Escritores (Nace). En esta actividad el experto, tras intervenir en Tenerife y La Palma, se centrará en desgranar las características de los nuevos poetas de las Islas que aparecen en dicha publicación, pero también abordará las figuras de María Zambrano, Juan Bautista Poggio, Miguel Unamuno, Dezső Kosztolányi, Justo Jorge Padrón y Andrés Sánchez Robayna.

Los alquimistas del Atlántico es, sobre todo, un libro realizado con elegancia, y una exquisitez máxima que garantiza una lectura placentera al estar producido con papel de calidad, excelente presentación, un texto bien situado estratégicamente en las páginas, que incluye mapas antiguos de cada una de las siete islas cedidas por el Museo Canario para introducir a los autores y como portada un cuadro del barrio de San Juan dibujado por Oramas. También incluye frases de Rafael Arozamena, Miguel de Unamuno, Benito Pérez Galdós y Miguel de Cervantes.

Zsolso ya tiene una experiencia previa de obras de calidad de este tipo, siendo la quizás el precedente más espectacular una antología de poetas árabes que publicó siendo embajador de Eslovaquia para todos los países de la península arábica. «Eran muy conservadores y yo quería sacar su cultura al público para quitar esa mala imagen que tenían en algunas partes del mundo tras el atentado del 11-S. ‘El mundo no les conoce a ustedes’ le comenté yo, ‘tenemos que sacar una antología de poesía de hoy con caligrafía árabe’, y al final se publicó y ganó el premio a mejor libro del año en Emiratos».

En Los alquimistas del Atlántico cada autor tiene un poema en el original en español y traducido, pero el resto son todos únicamente en eslovaco. La obra tiene una tirada original de 400 títulos con la idea de publicar el año que viene una segunda edición con más poetas de la Islas. Los autores que el traductor incluyen aquí son Aquiles García Brito, Cecilia Domínguez Cruz, Pedro Flores, Silvia Rodríguez, Santiago Gil, Lucía Rosa González y Jesús Díaz Armas.

Comienza con los poemas de Aquiles García Brito, que es a su vez el presidente de Nace, con El vendedor de caracolas, que trata «sobre la infinidad del ser humano, la entrega de labores, los sueños, los círculos de la vida»,, señala Zsoldos. Sigue con Cecilia Domínguez Cruz, una poeta feminista. Y continúa con Magia de Pedro Flores donde sitúa al amor como vencedora de la muerte con cierto aire barroco. La cuarta es Surfista de Silvia Rodríguez sobre estar «enfrente del océano o sobre las olas cuando tienes la sensación de que la vida no tiene fin», donde también se trata sobre la vida y la muerte. Santiago Gil incluye, entre otros, el poema Tesoros que afirma cómo «en la vida tenemos muchos problemas, pero también tenemos otras cosas», señala, «y estos son las cosas sin valor que todos tenemos y que te pueden hacer feliz en un momento y animar cuando estás triste», añade.

Uno de los poemas más destacados es el de Lucía Rosa González que en Simbiosis habla del fuego del volcán de La Palma. Antes que nada, Zsoldos recuerda que «ella se hizo famosa porque el volcán le destruyó la casa y las plantaciones de plátano de su marido». Y cuando llegaron los bomberos les dijeron que tenían que salir. «Se llevó libros, álbumes de fotos y se despidió de la casa, pero cuando ella veía que el volcán no paraba antes de la capilla del pueblo, como sucedió 50 años antes, ella pensó que tenía que describir eso como poeta y empezó a escribir El diario del volcán que salió en periódicos de toda España y llegó la televisión de Alemania que quería rodar una película sobre lo sucedido». El ultimo poeta es el tinerfeño Jesús Díaz Armas que habla sobre la misma profesión de la poesía en sí. «El poeta siempre quiere descubrir el mundo», señala el traductor, «y la palabra certera para romper la realidad que existe y crear uno nuevo nuevo para expresar lo innombrable».

Zsolso opina que «la poesía es la cosa más directo del corazón y liga los pueblos distintos porque se quita la cáscara del lenguaje», aparte de que «el poeta nunca miente, sabe cómo ligar los sentimientos» y «la buena poesía te ayuda a vivir y tal vez, algún día, a morir, porque en qué vas a pensar en los últimos momentos de la vida, y sólo la poesía te alivia». El traductor incluye una conclusión sobre cómo se fue encontrando con todoslos autores. «Los conozco personalmente y eso es bueno para un traductor porque tienes la pintura completa y si hay problemas puedes consultarlo».

Zsolso reconoce que «estaba buscando un libro que me dijera qué es la poesía canaria y encontré a Pérez Minik que tenía una antología de la poesía del Archipiélago escrito y publicado en 1952, el año en que yo nací, y dice cosas como que «la poesía es una alquimia que lo trastoca todo» y «esa poesía, por ser históricamente el género más desarrollado, nos ha servido de todo, como religión, épica, teatro y metafísica», concluye.