El Rocasa busca en Europa el bálsamo reparador de sus malas sensaciones ligueras

El Rocasa Gran Canaria afronta su debut europeo en el presente curso, con la esperanza de que la European Cup sirva de bálsamo reparador para su mal comienzo liguero, con un doble enfrentamiento ante el Holon Yuvalim HC. Ambos encuentros se disputarán mañana y pasado mañana en el mismo horario (18.00 horas) y en el mismo escenario, el Pabellón Antonio Moreno. En el encuentro de esta tarde, el equipo dirigido por Iñaki Ániz ejercerá de visitante a pesar de disputarse el partido en su casa; mientras que en el choque de vuelta que se jugará mañana, las teldenses serán las que ejerzan de locales, tras el acuerdo alcanzado entre ambas entidades.

Un rival sin pedigrí

Sobre el papel, el Rocasa ha tenido bastante suerte en el sorteo previo de la EHFEuropean Cup, que cruzó su camino con el del conjunto israelita del Holon Yuvalim HC, cuyo plantel está integrado prácticamente en su totalidad por jugadoras israelitas, con la salvedad de la guardameta bielorrusa Volha Nikitsina y la lateral izquierdo serbia Teodora Petkovic.

A pesar de no ser unas rookies en estas lides, lo cierto es que las israelitas no han superado en toda su historia una eliminatoria europea. En su última participación en la tercera competición continental cayeron en la segunda ronda del curso 2022-23, ante el Slavia Praha, que las derrotó en el primer partido por 21-41 y en el segundo por 30-15.

Su mejor clasificación histórica han sido los dieciseisavos de final en seis ocasiones entre 1993 y el 2000, si bien en todos los casos entraron a competir directamente en dicha ronda, siendo eliminadas en todas ellas.

La historia del Rocasa es diametralmente opuesta a la de su rival de hoy. El club presidido por Antonio Moreno ya sabe lo que es conquistar el trofeo de la tercera competición continental en tres ocasiones (2016, 2019 y 2022), la última de ellas tenía lugar en el Pabellón Martín Carpena de Málaga, ante el Costa del Sol, en un partido que pasará a los anales de la historia tras batir el récord de asistencia a un partido de balonmano femenino con dos equipos españoles, con Robert Cuesta dirigiendo el banquillo teldense.

Parece que ha pasado un siglo desde entonces. Lo cierto es que el Rocasa llega a la cita en su peor momento, tras encajar cuatro derrotas ligueras de forma consecutiva, que han situado a las isleñas en la posición de colista en la Liga Guerreras Iberdrola.

A pesar de todo, la mejoría en sus dos últimos tropiezos ante el Elche y el Granollers fue evidente, perdiendo ambos partidos por pequeños detalles. Europa debe de servir y más ante un rival de tan poca enjundia, para ayudar a reverdecer esos brotes verdes, en un equipo joven, sin demasiada experiencia en la élite, que necesita jugar partidos y sobre todo, ganar, para recuperar su confianza marchita en su próximo regreso a la competición doméstica.