El campo de fútbol de la Vega de San José, terreno de juego habitual del CD Árbol Bonito se vistió ayer con sus mejores galas para acoger la primera jornada de No a la Violencia en el Deporte Base. Un encuentro de carácter educativo, didáctico y preventivo, cuyo principal objetivo era el de inculcar a padres, entrenadores y aficionados la importancia de eliminar los actos violentos que, cada fin de semana, eclipsan los partidos de los pequeños magos del balón.
Una jornada de reflexión. Un pulso por encontrar, a través de la ilusión y el disfrute de un niño, la senda de la paz. Antonio González, organizador de esta iniciativa, y que contó con la colaboración de varios clubes de la Isla así como con el respaldo del Cabildo de Gran Canaria y el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, se mostró "satisfecho y esperanzado" con lo vivido ayer sobre el tapete verde de San José. Un acto que congregó a un centenar de amantes del fair play.
El evento, que acogió dos encuentros amistosos entre las categorías benjamines y alevines del CD Vegueta Árbol Bonito y el CD Valsequillo, sirvió de preámbulo a unas charlas informativas impartidas por varias personalidades del mundo del fútbol, en las que se trasladó la necesidad de enterrar el hacha de guerra y premiar, con aplausos, el juego colectivo.
Un grito a la esperanza. Un presente que busca cambiar el futuro.
