Pánico en el latir de un histórico. El Real Racing Club de Santander es un latifundio de miedo y dudas. El cuadro de Paco Fernández, penúltimo en la tabla, con cero puntos y seis goles en contra, quiere taponar la sangría. Defender como leones es su única salvación ante una UD insaciable. El conjunto cántabro agoniza en la retaguardia, custodiando el jardín del meta Mario.

Y para colmo de males, pierde por lesión a dos piezas capitales: el grancanario Juanpe [ex de la UD] y Bernardo [que en la pasada temporada jugó en el Córdoba]. Una lista a la que se unen el extremo Iván Moreno y el delantero Koné. Problemas en la retaguardia y falta de pegada. Los pecados de un recién ascendido como el Racing se refugian en las dos áreas. Pero llega con gasolina súper, no disputó eliminatoria de Copa -están sancionados por su plante en la pasada edición- y llegan frescos.

Sistema: 4-4-1-1

Esta cuarta jornada entre Racing y UD es un cruce de dinámicas. Una batalla de estados de ánimo. La euforia visita a la depresión. Un sello invicto como la UD, con tres triunfos y un empate, entre Liga y Copa, quiere tomar El Sardinero ante un rival que no conoce la victoria. El último éxito del Racing, en partido oficial, se remonta al pasado 25 de mayo, cuando el cuadro cántabro batió 1-0 al Llagostera en la vuelta de la eliminatoria por el ascenso a la categoría de plata.

Desde la fiesta del ascenso quieren estrenar su casillero. Pero además, la UD nunca ha jugado con el marcador en contra en estas tres primeras jornadas. El Racing, todo lo contrario, siempre ha ido por detrás en sus derrotas ante Girona (1-0), Mirandés (1-2) y Valladolid (3-1). Con el cuestionado Samuel -que jugó en la UD desde 2008 a 2011- en la muralla verde, Pedro Orfila ejercerá de segundo central. Francis e Iñaki, que deja su demarcación de extremo para reforzar el lateral zurdo completan la zaga. Soria y Granero portan el timón, y Miguélez luce su bandeja de plata. Ceder balones con fragancia divina para el gigante Mariano. Un rematador medieval de 1,88 metros que tiene la condición de héroe. Clave en el ascenso y en la condición de 'cuartofinalista' en la pasada Copa, este ejecutor de 24 años se refugia en su rol de Hércules.

El Racing cederá el esférico a la UD y saldrán como lobos. Aceptan la etiqueta de dominado, para sorprender con su juego de vértigo. A la caza de su primer triunfo, quieren escaparse de las mazmorras.