Un señor Barça, especialmente en una primera parte con las mejores sensaciones en mucho tiempo, se deshizo del Atlético de Madrid (3-1) en un partido en el que destacó la tripleta ofensiva azulgrana -Messi, Neymar, Luis Suarez-, quienes marcaron los tres goles.

No sólo ganó el Barcelona un partido, sino credibilidad y volver a creer en sí mismo después de las muchas dudas mostradas. Por una vez los de Luis Enrique sabían a lo que jugaban y firmaron 45 minutos primorosos. En la segunda mitad, el Atlético, con 2-0 en el marcador, se metió en el partido con un penalti, pero no tuvo el duelo controlado para llegar a empatar.

No es fútbol de toque, es otra cosa. No intervienen los medios, pero sus delanteros son más letales. Las contras son el eje argumental del juego y a estas alturas el barcelonismo ya lo tendría que saber. Cuanto antes en el Camp Nou se visualice el cambio de libreto, mejor para todos. Y así se hizo con el partido el Barça de Luis Enrique, a base de la máxima intensidad y de la calidad de sus tres estiletes.

El Atlético fue desarbolado desde el inicio. Los de Simeone, parapetados y buscando las contras, se encontraron con un rival que lo superó en todas las facetas del juego y no sabían cómo hincarle el diente a un adversario que no le dio ni una concesión. El Barcelona ofreció un fútbol excelso y se reconcilió con su público. No hubo tregua. Ni un pase de más, fútbol directo, jugadas para Messi y Neymar y a correr, sin que los medios fueran determinantes. En el minuto 12, una gran acción de Messi, con autopase dentro del área sobre Godín, acabó en la red. Falló Luis Suárez en el control y Juanfran en el despeje, pero Neymar no. En el minuto 13, Alba puso a prueba al meta rival y en el 17, en una jugada de estrategia, Gímenez le hizo un boquete a un tobillo de Neymar, que pudo continuar. La bota del brasileño, con la palabra 'Ousadia', resumía el espíritu de su equipo.

Messi, de nuevo entrando por la banda en el 29, creó peligro y en el 35, el argentino fue decisivo en el 2-0. Realizó un control orientado el rosarino, posiblemente con un brazo, Neymar atrajo la defensa con una diagonal y el balón llegó a Luis Suárez, que logró el 2-0.

El primer remate a puerta del Atlético fue desde los once metros. Un penalti señalado a Messi por una acción con Gámez. Mandzukic batió a Bravo y en el minuto 57 y con 2-1 empezó otro partido. El cambio de mentalidad del Atlético se vio con el cambio de Torres por Gabi. El Atlético apuntaba, pero seguía sin disparar. Los azulgranas ya no dispararon hasta la recta final del partido. Marcó Messi el 3-1 y finiquitó el partido en el minuto 87.