El Villa Santa Brígida ganó con claridad en casa al Marino y consolida su segunda posición en el grupo canario de Tercera División. Los locales doblegaron a un rival que no tuvo opciones. Un choque con muchas tarjetas, donde los locales terminaron con diez y los tinerfeños, con nueve.

El partido empezó con dominio visitante, pero sin acercamientos al área rival. Fue un control infructuoso. El conjunto local comenzaba a despertar sobre el cuarto de hora. Una falta lanzada por Pedro Pérez fue rematada de cabeza por Ángel y el balón sale rozando la escuadra. Seguidamente, nuevo golpe franco para el cuadro satauteño que ejecuta Álvaro y Santi cabecea fuera. Tras estos dos avisos, mediada la primera mitad, Pablo Álvarez se marchó de su marcador y sirvió a Álvaro para hacer el 1-0.

Antes de la media hora, el choque se le puso aún más de cara al Villa de Santa Brígida. El portero Marco rechazaba una falta que ejecutó Juanma Pérez y Santi aprovecha para anotar el 2-0. En el minuto 33, un disparo de Pedro Pérez lo detuvo en dos tiempo el portero vistante. El Marino llegó a la meta rival en una acción de Kevin, pero Facu tiró alto.

Tras el paso por los vestuarios, aburrimiento total. No hubo mucho que contar, más allá de acciones asiladas. El local Álvaro, por dos veces, rozó el 3-0, pero en ambas ocasiones el meta tinerfeño evitó el tanto. No perdonó el jugador del cuadro satauteño en la siguiente que tuvo. A pase de Adrián, puso el 3-0 tras una acción por la banda izquierda.

A partir de ahí no hubo más acciones dignas de mención, pues el Villa Santa Brígida se vio con el partido ganado ante un rival que se protegía para no recibir más goles. Cerca del final, Fabio buscó a Ángel, cuyo disparo no cogió puerta por poco. Seguidamente, Fabio lo intenta en acción personal, rematando la acción Ribalta, pero parando Marco.