Pleitesía a los reyes del mundo

La selección española de baloncesto, campeona del Mundo este domingo en China por segunda vez en su historia, aterrizó ayer en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, donde comenzó una tarde de recepciones y homenajes. El combinado que dirige el italiano Sergio Scariolo llegó a la capital española más de doce horas después de haber despegado desde Pekín, donde se proclamó campeón del Mundo al derrotar de forma abrumadora a Argentina (95-75).

Los jugadores españoles asistieron a dos recepciones oficiales antes de pasar a una gran celebración por el centro de la capital de España. La primera cita de la selección fue en el Palacio de la Zarzuela, adonde se dirigió tras haber sido recogidos por una guagua a pie de pista en Barajas, para recibir la felicitación del rey Felipe VI y la reina Letizia.

Ya en el Salón Magnolias, don Felipe y doña Letizia recibieron uno a uno a los integrantes de la comitiva, y el primero en saludarles fue el presidente de la Federación Española de Baloncesto, Jorge Garbajosa.

A continuación lo hizo el entrenador, Sergio Scariolo, y el capitán del equipo, Rudy Fernández, y después, el resto de jugadores, con los que Felipe VI fue intercambiando algunos comentarios distendidos. El rey fue el primero en ir estrechando la mano de los jugadores, técnicos y directivos y después lo ha hecho la reina, vestida de rojo, el color de la selección española.

Tras ese saludo individual, los reyes posaron junto a los componentes de la selección para los informadores gráficos, y Rudy Fernández entregó en sus manos al rey la copa de campeones del mundo conquistada en China.

Felipe y Letizia sujetan la copa

Además, Rudy Fernández colgó al cuello del rey Felipe VI una de las medallas de oro que lucían también todos los jugadores, ante lo que el monarca bromeó señalando que le daba algo de vergüenza portar esa distinción junto a todo el equipo.

Un equipo al que los reyes aplaudieron, mientras que los integrantes de la selección secundaron a su vez ese aplauso. Ya sin la presencia de los medios de comunicación, los reyes dirigieron unas palabras a todos los componentes de la selección en las que tuvieron oportunidad de felicitarles por el campeonato.

Fuentes de Zarzuela informaron de que el rey destacó la "maravilla" que supuso su triunfo y comentó que en la semifinal disputada contra Australia tuvieron "en vilo" a los españoles.

"Nos hacéis sentir muy orgullosos, con todo el país detrás", señaló Felipe VI, quien agradeció el esfuerzo de todos. Por su parte, doña Letizia bromeó con el hecho de que el domingo tenía una comida de celebración de su cumpleaños y que todos los que estaban en ella solo estaban pendientes de la final disputada contra Argentina.

Para la reina, el triunfo fue "la mejor celebración" que pudo tener, y recalcó que nadie sabe todo el esfuerzo que hay detrás de esta victoria y que ahora se está recogiendo el fruto de ese trabajo y con una "excelencia de valores".

Estaba previsto que la selección visitara primero Moncloa, pero el retraso en el vuelo procedente de China trastocó los planes y pararon primero en Zarzuela. Ya en Moncloa, el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, agradeció a los jugadores que hayan hecho "disfrutar" a todo el país y llevado "los colores de España a lo más alto".

"Gracias por hacernos disfrutar de un extraordinario deporte que es el baloncesto, un deporte divertido, y gracias como presidente del Gobierno por llevar los colores de España a lo más alto, al campeonato del mundo", declaró Pedro Sánchez en una breve recepción a los campeones mundiales en el Palacio de la Moncloa.

"Recibirnos cuando ganamos lo agradecemos mucho, pero despedirnos para darnos suerte lo agradecemos más, y por eso estábamos muy interesados en venir a traer una copa, que es muy especial, en un campeonato del mundo en el que no partíamos como favoritos, que sabe mucho mejor", aseguró Garbajosa en Moncloa.

Rodeo hasta Colón

Tras las recepciones institucionales en el Palacio de la Zarzuela y en la Moncloa, 'La Familia' se subió a un autobús descapotable en la Calle Princesa camino a Colón. A su paso por Plaza de España, Gran Vía, Calle Alcalá, Plaza de Cibeles y Paseo de Recoletos, los campeones recibieron el calor de la afición, e incluso algunas personas acompañaron al autobús durante todo el recorrido.

Entre los más entregados en la celebración por las calles de Madrid estuvo, una vez más, el pívot Marc Gasol, que hace unos meses también fue uno de los protagonistas de la fiesta del título de la NBA de Toronto Raptors. Mientras, Juancho Hernangómez bromeaba. "Tengo una misión importante con la copa, que no caiga de la guagua", señaló.

A las 22.15 horas llegaron a una abarrotada Plaza de Colón, que recibió a los doce jugadores, al seleccionador Sergio Scariolo y a su cuerpo técnico bajo los acordes del tema de Rocky, mientras los aficionados cantaban "campeones del mundo".

Uno a uno, los integrantes del equipo campeón fueron saliendo al escenario, con gritos de "MVP, MVP" a Ricky Rubio y con la euforia desatada cuando Rudy Fernández alzó el trofeo. "Solo quiero daros las gracias a todos vosotros, a mi familia, en especial a mi segunda gran familia, que son estos grandes jugadores. Gracias a todos los jugadores por ayudarme, por hacer que este verano fuera tan especial y por darme la ilusión de levantar esta copa. ¡Viva el baloncesto español!", declaró el capitán, que abrió la gran celebración que se prolongó hasta la madrugada.