Un tercio de los canarios vive bajo el umbral de la pobreza, según los datos que dio a conocer ayer la Red Canaria en Defensa del Sistema Público de Servicios Sociales (Redesscan). La organización pone en cuestión el actual modelo de ayudas sociales que impulsa el Gobierno de Canarias, exige "que se cumpla la ley" a la hora de concederlas en la práctica y reclama "más intensidad" en los planes contra la exclusión social. Los indicadores en este sentido no han hecho más que elevarse desde el ejercicio 2008, el primero en el que comenzaron a registrarse las consecuencias estadísticas de una crisis con fecha de origen en el año 2007.
El informe que divulgó ayer Redesscan revela que el 31% de la población del Archipiélago ya ha rebasado el umbral de la pobreza, a partir de los datos que maneja el Instituto Nacional de Estadística, traducidos a los parámetros europeos por la Red de Lucha contra la Pobreza (EAPN son sus siglas en inglés). Esta ONG ordena la información estadística según los estándares de la UE.
Así, en el citado estudio se contempla también un 35,3% de tasa de riesgo de exclusión en las Islas. O lo que es lo mismo, que ese porcentaje de residentes en Canarias está por debajo del umbral de la pobreza, sufre privación severa en lo que atañe al consumo y se encuentra en paro.
El objeto del informe, en el que Redesscan ha trabajado los últimos seis meses, es el de evaluar la aplicación de la ley 1/2007, que regula en las Islas de la Prestación Canaria de Inserción (PCI), la ayuda básica que concede el Gobierno regional a las personas en una situación más crítica.
Koldovi Velasco, portavoz de Redesscan, denunció que ésta no se está concediendo a las personas sin hogar, "y no entendemos por qué". La ONG ya ha acordado remitir el estudio al Diputado del Común, la Federación Canaria de Municipios y Provincias y la administración regional. Desde ya reclama que los procedimientos y cobros de la ayuda lleguen "en seis meses, como dice la ley, y no en ocho en nueve, como desgraciadamente está sucediendo".
