Una ocupación hotelera y extrahotelera superior al 90% dificultará en extremo la contratación de un alojamiento en esta Semana Santa en Canarias, ya que el adelanto a marzo del periodo vacacional coincide con una temporada alta del invierno que casi coloca el cartel del lleno.

El presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo (FETH) de Las Palmas, Fernando Fraile, señaló este martes que la ocupación para el sector es "un poco mejor de lo que suele ser habitual", en parte porque este año la Semana Santa cae marzo y la situación ya es muy buena con los turistas de invierno, en especial con los visitantes escandinavos.

"Vamos a estar más completos que otros años y pensamos, incluso, que habrá muchos propietarios de apartamentos o clientes que querrán pasar estas fiestas en el sur de las islas y les va a costar encontrar un alojamiento, porque la mayoría están ocupados por los escandinavos, que han contratado hasta el mes de abril", subrayó Fraile.

Según el presidente de la patronal, estos elevados índices de ocupación confirman las buenas cifras que presenta el turismo en Canarias durante la temporada invernal y que este año "son mejores en muchos casos que las registradas en 2015, que ya fueron buenas".

En su opinión, el aumento en las llegadas de turistas tiene que ver, por un lado, con la mejor situación económica de la mayor parte de los países europeos que, en términos generales, "ha crecido en los últimos años" y, por otro, a que hay algunos destinos "cerrados o con muy poca ocupación por haber sufrido atentados terroristas o problemas de seguridad".

Fraile aseguró que el sector intenta "fidelizar" a estos turistas "prestados" y agregó que "la prueba es que ya no es una cuestión de seis meses para las agencias ni una crisis que las coja de sopetón y tengan que mover a sus clientes a destinos como, en este caso, Canarias, porque tiene vendidos los billetes".

Aún así, Fraile estimó que muchos turistas que en su día fueron desviados a Canarias como alternativa vacacional por los problemas de seguridad de destinos competidores del Mediterráneo "ya vienen a las Islas porque están fidelizados y, además, serán clientes para el futuro también".