El Gobierno de Canarias, a petición del sector industrial, ampliará a los productos no agroalimentarios el estudio de las oportunidades de negocio que ofrece Senegal a las empresas de las Islas.
El consejero de Economía e Industria Pedro Ortega realizó ayer este anuncio tras revisar con la patronal Asinca los resultados del primer estudio encargado sobre las Oportunidades de Negocio para los Productos Canarios en Senegal, que analiza de forma detallada las posibilidades de venta de productos agroalimentarios isleños en ese país africano.
En la reunión participaron, además, el director general de Asuntos Económicos con África y consejero delegado de Proexca, Pablo Martín Carbajal; el presidente y el vicepresidente de la Asociación Industrial de Canarias, Andrés Calvo y Gonzalo Medina, respectivamente; y Jon Navarro, representante de la consultora Jokoo, afincada en Senegal y especializada en comercio internacional, que se encargó de elaborar el estudio, según informa la Consejería en un comunicado.
El documento sostiene que Senegal es uno de los mercados africanos que mejores condiciones presentan para la importación de bienes de consumo. De hecho, este país es en la actualidad el tercer socio comercial del Archipiélago en el vecino continente, si no se cuentan las exportaciones de petróleo.
El crecimiento del PIB interanual de Senegal, cifrado en una media del 7 % por el Fondo Monetario Internacional, y la existencia de una incipiente clase media contribuyen a ampliar las expectativas que ofrece como potencial cliente de los productos canario. En ese contexto, el estudio identifica once referencias de productos canarios que tienen un mayor potencial de inserción en el mercado, como son lácteos, embutidos, confituras, frutas en conserva, repostería, salsas y bebidas sin alcohol, así como otros bienes de consumo relacionados con la higiene, como los productos de limpieza y papel.
Ortega apunta que el sector primario en Senegal solo representa el 15 % del PIB, mientras que en el industrial apenas hay presencia de empresas de transformación agroalimentaria, lo que hace que el consumidor senegalés esté acostumbrado a las importaciones.
