La festividad del Primero de Mayo estuvo ayer condicionada por los resultados de las elecciones generales del pasado domingo y la próxima cita electoral del 26 de mayo. Por ello los sindicatos exigieron al PSOE, partido ganador de los comicios, que recupere la agenda social pendiente y derogue las reformas laborales, modifique el Estatuto de los Trabajadores para fortalecer la negociación colectiva y cambie la reforma de las pensiones impuesta cuando gobernó el PP. "Ahora no hay excusa para recuperar los derechos arrebatados por la crisis", advirtieron los dirigentes de UGT y CC OO.

En esta ocasión no hubo la unidad sindical que propició la etapa más dura de la crisis cuando gobernó el PP con mayoría absoluta. Las dos centrales mayoritarias convocaron manifestaciones en las dos capitales canarias y concentraciones en las islas no capitalinas, en las que participaron varios miles de personas. Sólo en la capital grancanaria se citaron más de un millar de personas, 500 según la Policía Local. Además de los sindicatos convocantes también estuvieron presentes otros como Cobas, Sindicalistas de Base, Alternativa Sindical Canaria o la CNT pero no estuvieron otras centrales con destacada representación como Intersindical, Sepca o CSIF. También participaron de forma activa en la manifestación colectivos feministas y LGTBI, pensionistas, afectados por la situación de Visocan, representantes de las empresas públicas de la Comunidad Autónoma, las kellys o Cáritas.

Entre los partidos políticos que participaron en la movilización del Primero de Mayo destacaron el PSOE -con la presencia de la cúpula regional e insular- Podemos, Nueva Canarias, Izquierda Unida y el PCE.

Los dirigentes sindicales se pronunciaron también sobre el signo del nuevo gobierno surgido de las urnas y apostaron claramente por un Ejecutivo "progresista" que lleve adelante los temas pendientes de corte social. El secretario general de UGT en las Islas, Gustavo Santana, expresó su confianza en que no se bloquee el proceso de investidura del nuevo presidente del Gobierno "con un corte progresista". Asimismo, destacó la necesidad de que la alta participación se mantenga en las próximas elecciones del 26 de mayo, pues "los fantasmas de la ultraderecha no han desaparecido y en Europa avanzan de forma muy importante las formaciones de ultraderecha".

Por su parte, el secretario general de CCOO, Inocencio González, en Santa Cruz de Tenerife, opinó que las urnas han pedido que el gobierno que se configure sea de "corte progresista" que no mantenga las cosas como están ni retroceda en las conquistas sociales "que tanto han costado". Al próximo Gobierno español le ha exigido que siga avanzando en cohesión social y en igualdad y derechos, para lo que es "imprescindible" que modifiquen la reforma laboral, que, a su juicio, ha permitido que la precariedad laboral se haya institucionalizado.

Precisamente, el lema de este Primero de Mayo es Primero las personas, contra el paro, la precariedad laboral y por la recuperación de derechos. En este sentido, Santana advirtió que existe mayoría suficiente en el Congreso de los Diputados para sacar adelante asuntos que se quedaron pendientes en la anterior legislatura, "hay números más que suficientes", y es necesario modificar la reforma laboral, "pues ha supuesto un incremento de la precariedad y la temporalidad laboral".

Manifiesto

En el manifiesto conjunto leído ayer tras las manifestaciones, CCOO y UGT recuerdan que "el crecimiento económico tiene bases muy débiles y el nuevo empleo es mayoritariamente precario", y que "no dejan de surgir intentos de huir de la regulación laboral para abaratar y precarizar el empleo naciente (falsos autónomos, falsos becarios, empresas multiservicios, etcétera). Ni siquiera la legalidad actual en materia de contratación se aplica", por lo que exigen derogar las reformas laborales, perseguir el fraude, y adoptar medidas destinadas a generar empleos estables y bien remunerados.

Ambos sindicatos han planteado un decálogo de propuestas a los partidos políticos, entre las que se encuentran la apuesta por un modelo económico distinto, con mayor base industrial, asentado en la innovación, la formación y cualificación eficaz, una política energética más eficiente, y la movilización de las zonas rurales para avanzar en cohesión social y territorial; reforzar el Estado de bienestar; actuar contra la discriminación por razón de género y garantizar la igualdad entre mujeres y hombres.

El secretario general del PSOE canario y candidato a la Presidencia del Gobierno, Ángel Víctor Torres, destacó antes del inicio de la manifestación en la capital grancanaria algunas iniciativas promovidas por los socialistas en materia laboral, como la reforma del Estatuto de los Trabajadores o la intención de acabar con la brecha salarial entre hombres y mujeres y planes específicos de empleo para jóvenes y mayores de cierta edad. "En Canarias también hay que hacer lo mismo, porque estamos en una tierra donde la lacra del desempleo nos sacude día a día y es algo que sufren miles de familias", por lo que "hace falta un cambio de política absoluta a partir del 26 de mayo".

En relación con las exigencias de los sindicatos, Torres indicó que el PSOE se ha pronunciado a favor de cambiar la reforma laboral y de un sistema de pensiones justo, pero pidió tiempo para el secretario general socialista y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con el fin de que pueda culminar el camino emprendido en los últimos diez meses desde que llegó a La Moncloa tras la moción de censura a Mariano Rajoy.

La manifestación en la capital grancanaria transcurrió entre el Parque San Telmo y la Plaza de Santa Ana, mientras que la de la capital tinerfeña se inició en la Plaza Weyler. En el resto de las Islas se celebraron concentraciones. En el caso de Lanzarote CCOO se dio cita con una concentración en la Calle Real, mientras UGT acudía a un evento más lúdico, mientras que en Puerto del Rosario los representantes de las centrales sindicales se manifestaron ante la Delegación del Gobierno de la capital majorera. En ambos casos acudieron apenar un centenar de personas, casi todos dirigentes y delegados sindicales. Entre algunas de las consignas que se corearon ayer figuraba la petición de una huelga general, algo que los sindicatos contemplan en el caso de que no se reviertan las reformas laborales y la precariedad del empleo.