La nueva presidenta de la Asociación Española de Banca (AEB), Alejandra Kindelán, ha confirmado este jueves que las patronales bancarias preparan un nuevo plan de medidas para mejorar el acceso a los servicios financieros en la España rural, como adelantó EL PERIÓDICO. La máxima responsable de la asociación de los bancos tradicionales ha apuntado que el principal objetivo de la iniciativa, compartida con la CECA (antiguas cajas de ahorro) y UNACC (cooperativas de crédito), es que medio millón de personas más puedan tener acceso al efectivo en sus municipios, ya que hoy carecen de dicha posibilidad. 

En unas jornadas de la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) y la Universidad Menéndez Pelayo, la exdirectiva del Santander ha precisado que como primer paso las patronales están elaborando un "mapa" sobre el problema de la exclusión financiera en España. Como adelantó este diario, el informe fue encargado al profesor Joaquín Maudos y sus dos principales conclusiones preliminares son que en torno a un 3,3% de la población reside en poblaciones sin sucursal bancaria, aunque sí con alguna otra vía de acceso físico a los servicios más básicos (como los cajeros o los conocidos como 'ofibuses'). El 1,4% de la población, en cambio, no tiene acceso al efectivo en su municipio.

Las patronales, ha explicado Kindelán, esperan tener los datos definitivos "en los próximos días" y su idea es presentar públicamente el informe junto con el plan de medidas sectoriales antes de agosto, idealmente a mediados de julio. "Estamos trabajando ya con muchos agentes para poder cerrar el plan y además en muy buena colaboración con el Ministerio de Economía. Hay que decir que no solo es un problema de los bancos, el problema de la despoblación es un reto de todos. Hemos visto que también hay un tema ahí con los servicios públicos. Pero los bancos desde luego tenemos el compromiso de trabajar en esto como máxima prioridad para que no se quede ningún cliente atrás, independientemente de su lugar de residencia y de sus capacidades digitales", ha asegurado. 

Inseguridad jurídica

En el Congreso, precisamente, se está tramitando una proposición de ley con amplio apoyo parlamentario para obligar a las entidades a poner un cajero en los municipios en riesgo de exclusión financiera, pero Kindelán se ha opuesto a esta posibilidad. "El cajero automático no lo resuelve todo; todo lo contrario, hay poblaciones o municipios donde no solo es que sea caro, es que no se va a utilizar. Muchos clientes nos dicen que lo que quieren es hablar con alguien. Esa es la cuestión que estamos viendo, como hoy en día la presencia física ya no es solo una oficina o un cajero: hay ofibuses, hay agentes financieros, hay oficinas de Correos", ha defendido. 

Kindelán también se ha referido al anteproyecto de Autoridad de Defensa del Cliente Financiero, que el Gobierno quiere llevar al Parlamento en otoño y que la AEB y la CECA han tachado de inconstitucional, como también adelantó este diario. "Somos el único país europeo continental que está creando una nueva autoridad con decisiones vinculantes y con una tasa solo para las entidades. Nos gustaría evitar que suponga más costes, más complejidad y más inseguridad jurídica en el proceso de resolución de reclamaciones", ha lamentado.

Fusión con la CECA

Asimismo, se ha pronunciado sobre la posible fusión de su asociación con la CECA, una posibilidad que lleva años sobrevolando el sector, que el Banco de España defiende y que depende sobre todo de la voluntad de los grandes bancos. "Pues por ahora la verdad es que estamos en un proceso de intensa colaboración. El objetivo en sí mismo para mí hoy no es la fusión, sino trabajar juntos, coordinarnos, estar en lo importante juntos", ha asegurado.  

En un tono más relajado y afable de lo habitual en las intervenciones públicas de los líderes patronales del sector financiero, Kindelán ha querido aprovechar su primera intervención ante la prensa como presidenta de la AEB para poner énfasis en el papel social de la banca. "Estoy muy orgullosa de trabajar en este sector, creo profundamente en el valor que aporta a la economía y a sociedad. Los bancos están más comprometidos que nunca en los problemas que preocupan a la sociedad", ha mantenido.