Los aeropuertos canarios arrancan su operación salida más frenética pendientes de la borrasca

Con la vista fija en las nubes. Así vivirán esta semana los miles de viajeros que planean pasar por los aeropuertos canarios. La borrasca que desde ayer se posicionó sobre el Archipiélago amenaza con afectar a la actividad aérea justo en la Semana Santa más frenética de la historia. Y es que los aeródromos isleños esperan coordinar durante los próximos días 14.860 vuelos, 2.516 más que en el mismo período de 2019.

De hecho, la meteorología adversa ya hizo de las suyas durante la pasada jornada, con retrasos en los aeropuertos de Tenerife Norte y Lanzarote por la mala visibilidad que dejaba la niebla en la pista. Lo peor, según las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), está por llegar, pues se espera que entre hoy y mañana a las lluvias y al viento les acompañe el aparato eléctrico. 

Está previsto que los días de mayor trasiego en los aeródromos canarios sean tanto hoy como el próximo sábado. En cada una de esas jornadas los controladores aéreos tendrán el reto de coordinar en torno a 2.600 vuelos. Eso si el tiempo lo permite. El día de ayer, que fue el primero de operación salida, se vivió con intensidad en el aeropuerto de Gran Canaria, donde se produjeron 428 vuelos –264 vuelos nacionales y 164 internacionales–. Le siguieron Tenerife Sur, con 266 vuelos –234 internacionales y 34 nacionales– y Tenerife Norte, con 245 vuelos –todos nacionales y con gran peso de trayectos interinsulares– .

Las lluvias deja las primeras inundaciones en Gran Canaria

Si bien Canarias lleva meses disfrutando de una alta ocupación gracias a los turistas internacionales que copan sus hoteles durante la temporada alta, la novedad durante la Semana Santa suele ser la intensa llegada de visitantes nacionales. Pero con tres días laborables todavía por delante –lunes, martes y miércoles–, cogerse una semana entera de vacaciones no es posible para muchos. Por eso, los vuelos que entraban ayer en las Islas iban más repletos de docentes que ansiaban descansar de sus trabajos que de otros profesionales.

Ese era el caso de Alberto Botta, un joven residente en Madrid que miraba por los cristales del aeropuerto de Tenerife Norte buscando el buen tiempo que le habían prometido: «Si las nubes no dejan al sol hacer acto de presencia tampoco pasa nada. Espero irme a finales de la próxima semana a Países Bajos y allí tampoco es que espere que haga calor», compartía divertido.

En la puerta de embarque la situación era parecida. «Espero que en Sevilla haga mucho mejor tiempo», apuntaba Juan Manuel Simó minutos antes de coger su vuelo desde el aeropuerto Tenerife Norte hacia la ciudad andaluza. Este profesor de Educación Secundaria afincado en las Islas consiguió sortear los atrasos y salir en hora hacia su tierra con un deseo muy claro: que el mal tiempo no haga deslucir las tradiciones ni agüe estas fechas clave para la hostelería.

«Voy con la vista puesta en disfrutar del ambiente propio de Semana Santa –con las procesiones– y de la familia durante los primeros días y, ya para el último fin de semana, me desplazaré en busca de sol y playa», confesó.

Abrigada de los pies a la cabeza –normal con el frío que hacía en La Laguna– esperaba Victoria Rodríguez por su vuelo. Esta joven tinerfeña, también docente pero de Primaria, se dirigía junto a una amiga hacia Valencia para comenzar unas vacaciones que le emocionaban bastante: un crucero que pasará por Francia, Italia y Palma de Mallorca. Pese a la inflación que afecta a los paquetes turísticos –que lleva escalando desde abril de 2021–, Rodríguez asegura no haber notado el aumento de precios en sus vacaciones: «Conseguimos una súper oferta así que diría que incluso este año gastaremos menos que en los anteriores», celebró.

Elevados precios para volar a Canarias

Quienes sí han notado el incremento de los precios son los canarios que viven en el extranjero y que en estas fechas aprovechan para volver a las Islas y ver a sus familiares. Tomás Hernández, presidente de Canarios Sin Alas, denuncia que ahora mismo una familia de cuatro personas tendría que pagar 1.000 euros en billetes de avión para volver a su tierra. «Y a quien piense en viajar al Archipiélago en verano le recomiendo que mire los billetes ya, porque los precios cada vez son más prohibitivos para quienes vivimos en la Península».

Lo cierto es que el Archipiélago se ha convertido en el destino favorito de los españoles durante esta Semana Santa –solo hay que ver cómo en las Islas se registra la mayor ocupación, con hoteles que colgarán el cartel de completo–. Todo ello ha disparado los precios de los billetes y con solo una búsqueda es posible ver cómo volar desde Madrid hacia cualquiera de las islas supone gastar entre 300 y 400 euros por trayecto.

También se han encarecido los hoteles. Entre mayo de 2021 y el pasado febrero el precio medio de una habitación ha subido un 39,5%, mientras que el precio medio por habitación disponible, que está condicionado por la ocupación y es una variable que aproxima mejor la rentabilidad del sector), el crecimiento es del 155,7% –más del doble–.

Pero el bum turístico no solo beneficia al Archipiélago. En el resto del país, la ocupación hotelera rondará el 85%, aunque podría ser incluso superior con las reservas de última hora. Tras Canarias, las costas peninsulares, las capitales de turismo interior con mayor tradición de celebraciones de Semana Santa y las grandes capitales como Madrid o Barcelona son las más demandadas por los viajeros.

A casa por vacaciones

Globos en forma de corazón, carteles con mensajes curiosos como «tu koala», abrazos interminables o besos apasionados. Esas son algunas de las imágenes que se repetían ayer tanto en las colas de embarque como en las puertas destinadas a las llegadas. Hubo tiempo para cantar Happy Birthday a Elma Davis, una británica afincada en Tenerife que se vio sorprendida por la visita de sus cuatro hijos –solo esperaba que viniera uno–. También abudaban las parejas que se quieren a la distancia por motivos laborales, como Isabel Jiménez y Samuel Hernández, y se reencuentran en Semana Santa. Estas son también fechas para volver a casa.