Ver más galerías relacionadas
Andrés Gutiérrez
Ver galería >La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Andrés Gutiérrez
La jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.
Noticia guardada en tu perfil
Ver noticias guardadasLa jornada del lunes 21 de agosto, la sexta desde que dio comienzo el aparatoso incendio de la Corona Forestal de Tenerife, amaneció bajo una densa nube de humo que cubrió casi todos los municipios del norte y otros tantos del sur de la Isla, pero con aires de optimismo debido a un incipiente control del perímetro que, en la jornada de ayer, apenas aumentó y se consolidó en 88 kilómetros. Tras el transcurso de una noche «sin demasiados sobresaltos» tal y como definió el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, a primeras horas de la mañana la meteorología auguraba una nueva jornada en la que los recursos de extinción podrían gozar de una condiciones óptimas para hacer frente al voraz fuego que afecta a la isla de Tenerife.