Los resultados de la analítica a la leche del ganado que resultó afectado por una envenenamiento al consumir restos de poda de los jardines de Puerto del Rosario han determinado que el citado producto es apto para el consumo humano y no tiene restos tóxicos. Sin embargo, el ganado de Kiko Vera se encuentra en cuarentena desde el pasado 30 de septiembre, fecha en que murieron ocho cabras y siete resultaron con lesiones graves. Un total de 2.000 litros de leche ha tenido que desechar este ganadero lo que le ha provocado importantes daños económicos.

A pesar de estos primeros resultados, tanto el Ayuntamiento de Puerto del Rosario como la Guardia Civil se encuentran a la espera de conocer los resultados de las muestras de sangre, de los rastrojos, de tejidos y contenido estomacal de los animales afectados que fueron remitidos a un laboratorio vinculado a la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) y que deben arrojar luz sobre las verdaderas causas del fallecimiento de las cabras.

Si bien inicialmente se especula que la muerte de los animales está vinculada a la ingesta de rastrojos procedentes de los jardines de la capital, que eran depositados por los operarios de la empresa FCC Jardines, en las inmediaciones del Vertedero insular, fuentes próximas a la investigación señalaron a este periódico que " no podemos adelantar nada hasta que no lleguen los resultados de las analíticas, pero tampoco descartamos que pudiera ser un envenenamiento intencionado".

Ante el interés mediatico que origino este suceso, la Guardia Civil desplazó hasta Fuerteventura a un equipo de especialistas del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) para que colaboraran con sus compañeros majoreros en el esclarecimiento de los hechos. Tras las correspondientes toma de muestras, la inspección ocular en la zona del siniestro y las averiguaciones pertinentes, será ahora el juez titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Puerto del Rosario, Juan Gallego Ortiz, quien deberá determinar si existe algún tipo de delito relacionado con la muerte de los animales. También la Policía Local de Puerto del Rosario ordenó el precinto de la zona ajardinada desde donde se extrajeron los esquejes que presuntamente originaron el envenenamiento.

Pleno

El Ayuntamiento de Puerto del Rosario celebró ayer un pleno extraordinario, a petición de los grupos de la oposición, para debatir el uso de pesticidas tóxicos en los jardines de la capital así como el vertido de rastrojos fuera del Vertedero insular.

El grupo de gobierno reconoció que permitió el deposito de restos de podas para que los ganaderos pudieran usarlos para alimentar al ganado. El portavoz del PP, Carlos Figueroa, acusó, al Ayuntamiento de haber vulnerado la ordenanza medioambiental " esto es un disparate monumental y contraviene sus propias ordenanzas".