Fuerteventura sigue siendo un destino atractivo para los principales touroperadores turísticos, a pesar de la situación de crisis sanitaria que envuelve al planeta. La incidencia del Covid-19 comienza a desvanecerse en la isla, dado que, actualmente, sólo tiene un caso activo de los 44 que han sido confirmados. Una isla libre del coronavirus y segura sanitariamente es la principal preocupación de autoridades y la patronal turística. Y en esa dirección encaminan sus pasos para la reconstrucción económica de la isla, aún sabiendo las dificultades que ello implica ante la actual crisis.
Esos objetivos contrastan con los proporcionados por el Patronato de Turismo que, ayer mismo, reconoció que las cifras de ventas en las agencias alemanas "siguen cayendo hacia el abismo. La comparación mensual del Tats-Reisebüro-Spiegel muestra que en abril de este año hay un 92,8% menos de ventas en comparación con el mismo mes del año anterior. Incluso las reservas anticipadas hasta octubre de 2020 no arrojan luz alguna".
El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Blas Acosta, y el gerente del Patronato de Turismo, Moisés Jorge, mantuvieron ayer un encuentro mediante videoconferencia con los representantes de varios de los principales touroperadores internacionales y compañías turísticas que operan en Fuerteventura, "quienes han mostrado su voluntad de comenzar las operaciones en cuanto las condiciones sanitarias y de apertura de fronteras lo permitan", según señalan fuentes cabildicias.
Directivos de los touroperadores TUI Europa, Thalasso nº1 Francia y Jet2 Reino Unido, además del presidente del colectivo de empresarios turísticos Excelfuert y el gerente de Asofuer, Luis Cardona y Mario de la Cruz, respectivamente, trasladaron al presidente insular "su interés por Fuerteventura como destino turístico, sobre todo atendiendo a los buenos resultados que la isla ha demostrado en esta crisis por Covid-19".
El presidente del Cabildo majorero, Blas Acosta, manifestó por su parte su apoyo e interés para que las operativas sean lo más rápidas y seguras posibles, y garantizó que desde el Cabildo se trabajará coordinadamente con el sector, apostando por la seguridad sanitaria a todos los niveles.
El optimismo de las autoridades insulares para que la reactivación de la economía majorera se produzca una vez levantado el estado de alarma y de manera inmediata, contrasta con el pesimismo de los empresarios que no observan una salida para esta situación de crisis social y económica. A ello se suma que Alemania y Reino Unido, los principales mercados del destino majorero, han aconsejado a sus ciudadanos no disfrutar de las vacaciones en Canarias, al menos en los próximos meses.
La caída en picado de la economía insular por el cierre de los hoteles, empresas y establecimientos comerciales ha provocado que 1.560 empresas se hayan acogido a un ERTE que ha afectado a 17.000 trabajadores, mientras que las cifras del paro continúa cabalgando al alza. La isla finalizó el mes de abril con 13.444 personas en situación de desempleo, lo que representa un 21,5% más que en el mes marzo.
