La futura rampa de varada de embarcaciones en la localidad de Pozo Negro comienza a ser una realidad después de la visita ayer de los técnicos de la Demarcación de Costas de Canarias para evaluar la ubicación de esta infraestructura demandada por los pescadores del municipio de Antigua.
El alcalde, Matías Peña, y el concejal de Agricultura, Ganadería y Pesca, Fernando Estupiñán, junto a la técnica de la Agencia de Desarrollo Local Yolanda Cedrés, visitaron el emplazamiento donde se plantea la construcción de una rampa de varada que permita la entrada y salida de pequeñas y medianas embarcaciones.
La visita se realizó con los técnicos de la Demarcación de Costas, «para que pudieran comprobar in situ la idoneidad de la ubicación para ejecutar un proyecto planteado desde el Ayuntamiento de Antigua desde hace dos años y que ahora impulsa su expediente en la Dirección General de la Costa y el Mar del Ministerio para la Transición Ecológica», señaló el mandatario municipal.
El proyecto presentado por el Ayuntamiento de Antigua consiste en la ejecución de una rampa de varada para embarcaciones, con una pendiente del 13% y una superficie de 243 metros cuadrados, una plataforma de maniobras de 300 metros cuadrados y parte del camino de acceso a la plataforma.
«Considerando el visto bueno inicial dado por los técnicos de Costas durante esta visita, creo que trabajamos en el buen camino para que esta rampa de varada en Pozo Negro sea una realidad, en respuesta a la petición de los pescadores del pueblo y del municipio», afirmó el concejal de área, Fernando Estupiñán.
Además, añadió que «quedamos ahora a la espera de recibir respuesta desde la Dirección General de la Costa y el Mar, en un proyecto de relevante importancia para el municipio y en especial para Pozo Negro, recuperando un muelle natural en el que ya trabajaban las embarcaciones de generaciones pasadas para la descarga y carga de animales o productos».
