Un alemán quiere comprar la casona donde César Manrique pasó su niñez

El padre del artista lanzaroteño vendió el inmueble a principios del siglo XX

Los actuales propietarios la han ofrecido al Cabildo, sin obtener respuesta

Un alemán quiere comprar la casona donde César Manrique pasó su niñez

D. L. P.

A. C.

El patrimonio histórico de Fuerteventura está a punto de perder y, sin que nadie lo remedie, una de las viviendas más antiguas de la isla construida durante el siglo XV en la Vega de Abajo de Tetir, en el municipio de Puerto del Rosario. En esta casona nació el afamado poeta Domingo Juan Manrique Rodríguez, así como pasó parte de su infancia el malogrado artista universal César Manrique, al tiempo que también el filosofo vasco Miguel de Unamuno disfrutó de la misma durante su destierro en la isla. Un empresario alemán ha realizado una suculenta oferta a los herederos del último propietario de la casa señorial. La casona ha sido ofrecida al Cabildo de Fuerteventura y al Ayuntamiento de Puerto del Rosario, sin que haya habido respuesta alguna.

La citada casa señorial forma parte de la historia señorial de Fuerteventura. Entre el inmueble y los terrenos adyacentes suman unos 5.000 metros cuadrados. En los mapas anteriores a la creación de la iglesia parroquial de Santo Domingo, en Tetir, que fue eregida en 1772, ya aparece el inmueble situado en la Vega de Abajo, según se recoge en documentos de la familia propietaria, manteniéndose hasta la actualidad su arquitectura señorial tradicional, con sus dos sobrados imponentes que sobresalen en la vivienda. En su interior se encuentra un amplio patio con luminosidad natural y con un aljibe central, a la que rodea un jardín con numerosas y variadas plantas, y en especial un antiguo heliotropo centenario. También la casona está bordeada en el exterior por unos asientos de piedra, desde donde se puede vislumbrar una panorámica que contempla el caso de la Vega de Tetir y el entorno circundante, con la entrada a al valle por la Sargenta hasta la zona alta de Tamariche en el extremo opuesto, la montaña de San Andrés en la parte central y el Aceitunal al fondo.

De izquierda a derecha, uno de los dormitodios, el patio central y el comedor principal de la Casona de la Vega de Abajo, ubicada en el pueblo de Tetir. | | LP/DLP

Uno de los dormitorios de la Casona de la Vega de Abajo, ubicada en el pueblo de Tetir. / LP/DLP

Una de las numerosas dependencias de la Casona de la Vega de Abajo. | | LP/DLP

Una de las numerosas dependencias de la Casona de la Vega de Abajo. / LP/DLP

Propietarios

Han sido varios los propietarios de esta casona antigua, Algunas de las familias señeras del Tetir, como Alonso, Ocampo, Manrique, Soto o Martínez, han sido propietarios o moradores. Una de las personalidades que nació en la misma fue el poeta Domingo Juan Manrique Rodríguez. El escritor ha sido distinguido con el recordatorio de su nombre a la calles que pasa por delante del inmueble histórico o al Colegio de Tetir.

También pasó su infancia en la Casona de la Vega de Abajo, el artista lanzaroteño César Manrique, que volvió a visitar el inmueble de su niñez poco antes de su fallecimiento «cuando el Cabildo estuvo interesado en adquirirla y le pidió que visitara la isla para ocuparse de su restauración», afirman los actuales propietarios.

Un alemán quiere comprar la casona donde César Manrique pasó su niñez

Un alemán quiere comprar la casona donde César Manrique pasó su niñez / A. C.

A principios del siglo XX, Gumersindo Manrique y Saavedra, padre del malogrado artista, vendió su propiedad a Casto Martínez Gallego, que la escrituró a nombre de su esposa Rosario Soto Ocampo. Curiosamente, un siglo después se sigue referenciando que el patriarca de los Martínez, en su etapa de presidente del Cabildo de Fuerteventura, «solía recibir en dicha casona a don Miguel de Unamuno, durante su destierro majorero y compartir conversas sustantivas, así como viajar juntos por el interior de la isla», recuerdan los herederos.

Una vez que falleció Miguel Martínez Soto, el último propietario de la histórica casa señorial, donde había nacido, el cual había afrontado numerosas restauraciones en las últimas décadas, sus hijos y herederos decidieron retomar con el Cabildo de Fuerteventura el ofrecimiento de su adquisición.

En el inmueble histórico nació el prestigioso poeta Domingo Juan Manrique Rodríguez

Los actuales propietarios, hijos y herederos de Miguel Martínez Soto y Consuelo García Évora, han presentado en tres ocasiones una oferta de compra de la casona al Cabildo de Fuerteventura «a los presidentes Marcial Morales, Sergio Lloret y la actual presidenta Lola García. Nunca hemos recibido respuesta del interés de la institución por este inmueble histórico», señalan los actuales propietarios. Además, añaden que «también la hemos ofrecido al Ayuntamiento de Puerto del Rosario e incluso el exalcalde Juan Jiménez llegó a visitarla».

Un alemán quiere comprar la casona donde César Manrique pasó su niñez

Un alemán quiere comprar la casona donde César Manrique pasó su niñez / A. C.

Los herederos reconocen haber recibido varias ofertas, entre ellas, la de un empresario germano que pretende dedicarla al turismo rural y a otras actividades relacionadas con la cultura y la historia. «Nuestro deseo es que la Casona de la Vega de Abajo se convierta por el Cabildo en un centro cultural e identitario del pueblo majorero, para que siga cuidándose el ancestral inmueble y se perpetúe en la historia».

Más contundentes se muestran los actuales propietarios al señalar que «a partir de este momento se escapará de nuestras manos la intención que hasta estos momentos hemos tenido». Además, agregan que «seguimos interesados en conocer el estudio que realizó el Cabildo sobre La Vega de Abajo. Nosotros aportamos hechos históricos comprobados, que respaldan el valor de su antigüedad, a la que hay que unir el buen estado de conservación».