- Empieza el año con una 'papa caliente' de complicada solución, el cierre del centro de mayores de La Aldea. ¿Cuál es el destino de los internos y de los trabajadores?

- El destino de los internos es seguir, por lo pronto, en la residencia. El Cabildo tiene una salida a esta situación, pero no la que plantea el Ayuntamiento, que es cubrir el agujero de 400.000 euros. Eso no es viable, como tampoco que el Cabildo se haga cargo de la residencia y por ende de sus 25 trabajadores, lo que supondría entrar por la puerta de atrás en el personal del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IASS). Primero son las personas y después veremos cómo se resuelve la parte administrativa o económica. Los internos son ahora la prioridad y en ese sentido tenemos la solución. Estamos reservando las plazas en otras residencias e incluso tengo la posibilidad de llevar a los 29 a una misma residencia, estableciendo el convenio que no ha firmado La Aldea con otra empresa que pueda gestionarlo. La cuestión ahora es salvar la parte jurídica, porque no voy a resolver un problema con una ilegalidad. ¿Que cómo se hace? Pues teniendo la pausa que se requiere. El Ayuntamiento ha decidido cerrar y su alcalde lo tiene bien claro, pero el procedimiento es otro. El dinero que se aporta para el mantenimiento de esa residencia es en un 40% del Gobierno canario, un 40% del Cabildo y el restante 20% del Ayuntamiento. El Cabildo ha cumplido con su parte y ha puesto el dinero. En 2008 se le dio a esa residencia una forma de actuar para que fuera solvente y a coste cero. No se siguieron esas pautas y la prueba evidente es que la deuda supera los 379.000 euros. Claro que es fácil poner esos 400.000 euros y empezar de cero, pero no tenemos ese dinero. Por parte del Cabildo sería una irresponsabilidad hacer eso, pues habría que hacerlo con el resto de las residencias que están en la misma situación.

- El alcalde de La Aldea pone dos alternativas sobre la mesa. Que el Ayuntamiento pague la deuda y el Cabildo asuma la gestión a partir de ahora; o que el Cabildo y el Gobierno paguen esos 400.000 euros para que el Ayuntamiento se haga cargo de la residencia desde cero. ¿Es posible llegar a un acuerdo?

- En la reunión que tuve con el alcalde en La Aldea ya planteé que poner el dinero es inviable. La deuda es del Ayuntamiento y es el responsable de los trabajadores. No olvidemos que es una empresa municipal la que gestiona porque no se sacó a concurso. Difícilmente puede el Ayuntamiento aportar esa cuantía cuando hay pólizas por valor de 250.000 euros que forman parte de la deuda. Habrá que averiguar dónde se invirtió el dinero. El alcalde ha puesto una persona al frente de la residencia y el resultado es que ahora se paga la mitad por el agua, lo que significa que antes se gestionaba mal.

- ¿Cuándo se realizarán los traslados desde La Aldea y hacia dónde? ¿Hay sitio en otras residencias?

- Si no hay ningún impedimento legal, lo podríamos resolver en 48 horas. El único inconveniente es que sus familiares tendrán que desplazarse para verlos, pero no tenemos otra alternativa.

- Problemas similares tienen las residencias de mayores de Gáldar, Agüimes, Moya o Ingenio. ¿Llevan el mismo camino de La Aldea?

- Como decía Confucio, lo difícil de recorrer 10.000 kilómetros es dar el primer paso. Cuando alguien sirva de punta de lanza y rompa, los demás intentarán seguir el mismo camino, pero aquí la responsabilidad no es solo del Cabildo, es de todos y cada uno de los entes que prestan servicios.

- ¿Pero hay peligro de cierre de alguna de estas residencias municipales?

- Posiblemente, pero si analizamos el trasfondo vemos que es la mala gestión la que nos ha llevado a esta situación. Ninguna residencia municipal tiene que dar números positivos, pero no puede ser un agujero sin fondo. Pongo el ejemplo de Ingenio. En el mandato anterior, cuando el PSOE gobernaba en el Ayuntamiento, tomó la decisión antes de las elecciones de quedarse con la residencia de mayores sin mirar las consecuencias a largo plazo. Y la consecuencia es que la deuda que genera al Ayuntamiento es de 180.000 euros. Tras analizar su caso, le hemos dado 12 plazas más para amortiguar esa deuda y le hemos dicho que no tiene obligación de tener un médico y un ATS, pues son internos de bajo requerimiento. Con eso tendrá perdidas, pero no un agujero.

- ¿Es viable el sistema insular de atención sociosanitario o puede quedar colapsado en cualquier momento?

- El sistema ya está colapsado porque hay un lista de espera. De hecho, la Ley de Dependencia ya no contempla que las personas de bajo requerimiento tengan que estar en un centro, pero claro, esas personas llevan años ahí y no se les puede poner en la calle. Lo mismo ocurre con los menores. Se cerraron centros de menores y se desviaron a ONG, pero tenerlos en familias normalizadas hubiese sido más barato que tenerlos en centros públicos. El único que queda abierto es el de Santa Rosalía y el problema es tan acuciante que estamos atendiendo a la segunda generación, a los hijos de los que también fueron atendidos allí . Eso significa que no estamos mirado la solución más efectiva de cara al futuro. Todo el sistema es deficitario, pues la demanda va mucho más rápida que la oferta y que la capacidad económica. No olvidemos que el 30% del presupuesto del Cabildo está destinado a la atención sociosanitaria.

- El presupuesto global del Cabildo para 2012 ha subido un 7,69%, pero la partida para el IASS sólo crece un 2,1%, ¿por qué?

- El gasto social tiene un mecanismo que todo lo que le eches puede ser insuficiente, porque mientras más dinero mayor es el campo de acción. Lo que hay que hacer es priorizar los servicios, ver cuáles son los más importantes y los que pueden ser atendidos bajo otros parámetros. Es verdad que se abrieron residencias en el mandato anterior, pero que alguien explique lo de San Mateo. El centro de mayores costó varios millones para solo cuatro usuarios. Eso no se sostiene.