Igual que Fuerteventura tiene un pinar en Betancuria, Telde lo posee junto a la orilla del mar. El pequeño bosque de pinos marinos (casuarinas) existente desde hace décadas en el vértice sur de la playa de Melenara se ha convertido ya en un lugar alternativo donde decenas de familias de la isla suelen pasar una amena jornada de ocio.
Este hecho, con el consiguiente transporte de mesitas plegables, neveras, sillitas y hasta burras ha llevado a la concejalía del área del consistorio a pedir permiso a la Demarcación de Costas para crear una pequeña zona de picnic o merendero entre las ramas.
El boceto que la edil María Inmaculada González Calderín tiene en mente no es ni pomposo ni grandilocuente, pero sí la mar de efectivo. "Lo que queremos hacer es construir siete pequeñas mesas con sus respectivos bancos utilizando madera, picón y sogas. Todo con material reciclado y con personal del Ayuntamiento", aclaraba ayer tras ser interpelada por este rotativo al respecto.
La munícipe dice ser consciente de los encantos que esta zona posee -la misma donde en 2005 se produjo una tala masiva que provocó las iras de los grupos ecologistas, encadenamiento incluido- y por ello apunta que la instalación de este mobiliario urbano, acompañado de papeleras pero no de alumbrado al considerar que su uso será diurno, contribuirá a dinamizar esta esquina de Melenara.
El municipio sólo dispone a día de hoy de dos instalaciones públicas similares: el pequeño merendero existente al inicio del barranco de Los Cernícalos y la zona de barbacoas construida años atrás en el parque de las Mil Palmeras del Valle de Jinámar.
En el caso de Melenara, el uso de fuego quedaría totalmente prohibido y los planes más optimistas señalan que su estreno no se producirá hasta 2014, "siempre que Costas dé el visto bueno". A la espera de su creación, lo que sí podrán estrenar ya estos días los vecinos del litoral es la nueva ducha colocada en la playa de Tufia.
