Los pedales contra la drogadicción no perdieron el buen ritmo. En fila india, arrimados a la derecha y ataviados de cascos, maillots y deportivas, los casi 80 participantes del paseo por la salud organizado por la Fundación Yrichen y la Comisión de Fiestas de San Isidro, comenzaron ayer la ruta por el municipio teldense. Una cita señalada, con pistoletazo de salida en el barrio de La Pardilla, al que desde hace más de 20 años acude un gran número de ciclistas aficionados.
"Queremos mantener esta tradición porque para nosotros es también una manera de estar presentes en el barrio en el que nacimos como organización y siempre hemos querido cooperar con el barrio", cuenta el sacerdote y fundador de Yrichen, Jorge Hernández, quien este año no pudo subirse a la bicicleta por motivos de salud.
A las 9.30 horas empezaron a llegar los primeros deportistas. Abierto a todas las edades, el único requisito, por motivos de seguridad es ser mayor de diez años. José Miguel Vega, roza el límite. Acompañado de su padre Francisco, es el segundo año que participa porque le gusta mucho "montar en bicicleta, pero también el fútbol", asegura mientras colocaba el número 35 en su camiseta.
En el dorsal de Manuel Sánchez destacaba el 32. Él, que tiene unos cuantos años más que el pequeño José Miguel, lleva participando "desde siempre" en este evento. A sus 72 primaveras se declara un deportista nato que se sigue encontrando con "ganas de marcha" y "si Dios quiere" seguirá participando muchos años más en esta pedalada solidaria.
La veteranía, sin embargo, es para Óscar Rodríguez, quien no tiene intención de dejar la bicicleta. "Él ha participado desde el principio", explica Jorge Hernández. "Lo hago porque me parece una muy buena iniciativa para dar ánimo a la juventud y que vean que hay otras alternativas a la droga", apostilla el vecino de 59 años.
10.30 de la mañana. Inscripciones en la plaza de San Isidro finalizadas, camisetas entregadas, cascos abrochados y muchas ganas de comenzar. Sobre bicicletas, verdes, rojas, plateadas, blancas, azules, de carrera, de paseo, más caras, más antiguas, propias o del vecino, los participantes se disponen a mover las piernas, o como en el caso del pequeño Diego García de tres años, a disfrutar de las vistas y el paseo mientras Jesús, su papá, le da a los pedales.
La marea azul de camisetas, "donadas por Autos La Pardilla" según cuenta el sacerdote, con el lema "En bici por la salud", recorrió durante algo más de hora y media, los barrios de San Isidro, Las Remudas, San Antonio, San Gregorio, San Juan, para finalizar donde todo comenzó: en La Pardilla. "Este es un barrio con mucha iniciativa, muy activo y con gran prestigio y con este paseo, además de ayudar a nuestros chicos, también estamos mostrando al resto de Telde que en La Pardilla estamos en fiestas", apostilla Hernández.
Y no solo participaron a nivel individual los vecinos llegados de todas partes de la localidad teldense, también estuvieron presentes varios clubes de ciclismo del municipio. Con su indumentaria distintiva estaban los chicos de Bicitel, Siete Puentes, Lizarte y Free Bike. Para estos últimos es su primer año de un pedaleo que tenía por causa la concienciación y prevención de la drogadicción, pero también pasar un buen rato entre vecinos y amigos, así como fomentar hábitos de vida saludables.
Una vez finalizada la actividad física, toca reponer fuerzas, no sin antes hacer un viaje por los recuerdos y la historia de este evento organizado desde hace más de dos décadas por Yrichen. Tras la proyección del vídeo con fotos y momentos de ediciones pasadas, llega el momento del recomponedor refrigerio que en este caso constaba de un bocadillo de fiambre, chocolatinas, agua y refrescos. "Todos los alimentos nos lo ha donado Spar de La Barranquera", matiza el fundador de la organización. La jornada terminó con un sorteo de accesorios para bicicletas, mochilas, libros y gorras que se llevaron a casa los tres más afortunados.
