Luis Ibarra evidenció ayer las diferencias entre el PSOE y Nueva Canarias en el Cabildo de Gran Canaria. El líder socialista aseguró que la moción de censura a Antonio Morales "claro que está sobre el tablero" y puso en duda el progresismo de los nacionalistas: "Es un partido nacionalista y si escarbas un poco o bastante puede ser progresista. Yo no entiendo como progresismo abstenerse en los presupuestos del 2019 de Pedro Sánchez, que eran eminentemente sociales", recordó en una entrevista a Onda Cero.

Aunque no descartó un pacto de gobierno con NC, su tono duro hacia los nacionalistas deja claro que el escenario más cercano en la corporación insular es el de una moción de censura a Antonio Morales, que el 22 de junio será nombrado Presidente del Cabildo tras ser el más votado en las elecciones del pasado 26 de mayo. Pero NC no ha movido ficha y de momento no tiene apoyos suficientes para formar gobierno. PP, CC-Unidos y Ciudadanos se han mostrado contrarios a un Cabildo liderado de nuevo por Morales y son más partidarios de respaldar a Ibarra, que también cuenta con ocho consejeros, mientras que las dos de Podemos son insuficientes para NC.

"La realidad es que NC no cuenta con el apoyo de ningún otro grupo, tendrá que hablar con el PSOE y hasta el momento no nos hemos sentado", afirmó Ibarra, que admitió que también hay que esperar a lo que ocurra en Gobierno y Ayuntamientos. "Por encima de todo está acabar con CC después de 26 años de mal gobierno y de dejar a la Canarias en los peores indicadores de pobreza y de desigualdad", expresó.

Cuestionado por la exigencia de Román Rodríguez de vincular Cabildos y Ayuntamientos a las negociaciones entre socialistas y nacionalistas, Ibarra tensó la cuerda: "Intentarán vincular los acuerdos en el Gobierno con los Ayuntamientos y los Cabildos con pactos en cascada. Siguen el ejemplo de CC, no hay que olvidar que NC viene de CC. Parece que son los únicos progresistas que existen en la Tierra", añadió con dureza.

Insistió Ibarra en que "la moción de censura está tan el tablero que hay grupos políticos que han dicho claramente que están dispuestos a que la presidencia la tenga el grupo socialista sin pedir nada a cambio y ya luego podemos podemos hablar de la hoja de ruta. Entienden que en estos cuatro años no ha habido diálogo y también lo dije en campaña, hay que hablar con todos. Ha faltado diálogo, cintura política, buscar proyectos en común".

Ibarra recordó que no es "un brazo loco" del PSOE ya que "hay compañeros que no quieren precisamente este pacto que se está intentando vender como el más lógico". "El sentir mayoritario de una parte del PSOE es que tampoco podemos seguir coaligándonos a NC", aseguró además de recordar que en Telde, Artenara o Teror los acuerdos con NC "son muy complicados, esto no es un tema de Luis Ibarra". Recordó el líder socialista que su discurso no es nuevo ya que desde antes del inicio de la campaña viene criticando la gestión de Antonio Morales. "También he dicho muchas veces que cuando trabajas con NC siempre hay una deslealtad; cuando uno se sienta con NC tiene que exigirles lealtad desde el minuto uno", indicó.

Hacienda, una línea roja

Ibarra extendió su tono crítico a la hipótesis de que gobernara con NC: "En ese caso vamos a intentar evitar que se utilicen los fondos del Cabildo para gestionar nada más que aquellos que han votado a NC. Hay que gestionar para todos, te hayan votado o no".

En las negociaciones con los nacionalistas puso una línea roja: la consejería de Hacienda: "Fui el consejero de Hacienda y nadie me podrá decir que prioricé a unos antes que a otros", aseguró sobre esta área.