La villa de Santa Brígida contará con una ruta peatonal de ocho kilómetros de largo que circunvalará el término municipal y que conectará con Las Palmas de Gran Canaria a través del barranco Guiniguada. El Consistorio acaba de recibir el proyecto técnico de este circuito circular. La ruta peatonal se denomina Circuito circular del término municipal de Santa Brígida.

El proyecto lo entregó hace unos días el ingeniero Miguel Morales, que también es uno de los responsables de la red ciclista de la capital grancanaria. "Es un proyecto maravilloso, único en Canarias", señala Eduardo Martín, el que fuera concejal de Urbanismo de Santa Brígida con Ando Sataute en el pasado mandato y promotor de la idea.

El nuevo alcalde de Santa Brígida, Miguel Jorge Blanco, manifestó que no tiene ningún interés en paralizar este proyecto, "salvo que tenga problemas técnicos o alguna cuestión que impida su ejecución. Yo no solo no tengo problema, sino que me parece una buena idea. Esa idea también la expresé en la campaña electoral: tratar de fomentar los circuitos peatonales".

Ahora tendrá que pasar por la supervisión de los técnicos municipales "y en la supervisión se verá. A mí el objeto me parece interesante y la idea me parece correcta. Cuando se encarga un proyecto fuera, tiene luego que pasar a la supervisión municipal. Se revisarán los parámetros y las unidades previstas en el proyecto, las autorizaciones necesarias de medio ambiente y paisajes protegidos, las autorizaciones del Consejo Insular de Aguas por afectar a barrancos, por si hay que hacer algún deslinde. La idea es hacer un circuito por el que puedas ir caminando de Santa Brígida a Las Palmas", dijo Jorge.

Martín pone el antecedente de esta ruta circular en el proyecto Guiniguada del arquitecto y paisajista fallecido José Miguel Alonso Fernández-Aceytuno de hacer un gran parque urbano. "Él tuvo la visión de coger desde el Pambaso hasta todo el cauce del Guiniguada con la intención de que fuera el gran parque de Las Palmas. Así como Nueva York tiene el Central Park o Madrid tiene El Retiro, para recuperar las vías de comunicación de gente que va a hacer ocio y deporte, e ir poniendo por el camino centros de interpretación que señalen los valores etnográficos de la zona".

Una parte del proyecto Guiniguada de Fernández-Aceytuno es el parque agropecuario El Galeón, que el Cabildo ejecutó con fondos europeos. "El proyecto integral que tiene Ando para Santa Brígida no solo era esto, sino que el circuito partiera del parque El Galeón, convirtiéndolo en un parque urbano y así está en el Plan General de Ordenación".

El parque, según Martín, no está siendo utilizado de la forma en que se debía. "Por eso vimos que podía ser el parque de Santa Brígida y de Las Palmas, con áreas de picnic, rocódromos, zonas para mayores, habilitar senderos accesibles, un anfiteatro al aire libre... y convertirlo en un gran parque urbano. La Cotmac lo aceptó y convirtió un parque rústico en urbano. Por lo tanto, todo el parque El Galeón es urbano, que era nuestro proyecto del parque Sataute, el punto focal de donde partía y confluía el sendero circular. Allí también está el Museo del Agua".

El proyecto primigenio de Ando pretendía ampliar el parque Sataute hacia la presa de Santa Brígida, que pertenece al Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria. "Firmamos un convenio con el ayuntamiento capitalino para dar un uso recreativo a la presa, poniendo unas barquitas y unos merenderos. Por allí pasa el circuito del sendero circular. Es muy bonito, espectacular". La adjudicación del proyecto se adjudicó por procedimiento abierto simplificado en dos lotes por un importe total de unos 25.000 euros y un plazo de ejecución de tres meses. "La potencia de este proyecto no solo era el anillo peatonal alrededor de Santa Brígida, sino el nexo con Las Palmas a través del Guiniguada, el nexo con los senderos de Santa Brígida, donde confluyen todos", añade.

Eduardo Martín, exconcejal de Urbanismo y promotor de la idea, lo tuvo claro desde el primer día. "Yo vivo en Santa Brígida y camino mucho. He vivido fuera, en Europa, y uno de los problemas que tiene Santa Brígida y la isla de Gran Canaria en general es que no hay accesibilidad. Están las carreteras y no hay margen, no hay aceras para los peatones. Estudiando la red de senderos antigua vi que había una posibilidad de retomar los cauces del barranco que rodean la meseta sobre la cual está la Vega de Abajo, que es Santa Brígida. La Vega es una llanura en medio de dos barrancos, el del Colegio y el de La Angostura, el Guiniguada".

Martín explica su proyecto. "El Guiniguada está habilitado. Se me ocurrió la idea de abrir el barranco, que estaba lleno de zarzas, de cañas, de vegetación. El barranco del Colegio pasa entre la carretera del Centro y la de Los Olivos; tiene más de tres kilómetros desde el casco, desde el parque agropecuario El Galeón, hasta el encuentro con el Guiniguada, que se produce en el barranco de Los Olivos".

La idea era abrir y crear un anillo alrededor de Santa Brígida, por el cual no pasa ninguna carretera. "Es un anillo peatonal de ocho kilómetros exactamente, con una diversidad botánica maravillosa, que tiene todos los pisos de vegetación: laurisilva, pinar, termófilas... de todo un poco. También tiene mucho contenido etnográfico. Está la ruta del agua, acequias, canalizaciones, pozos, bodegas, batanes. Pasado el Garoé está la finca del Batán, donde había un batán antiguo. Es muy rica la zona".

La intención es que aquello sea el anillo concéntrico, del cual partían y confluían todos los caminos importantes de Santa Brígida. "El proyecto es que tú puedas salir del casco de Santa Brígida, te metas en el anillo y puedas enganchar hacia La Atalaya, Pino Santo o Las Palmas por el sendero del Guiniguada". El estudio costará unos 25.000 euros.