La Fundación Canaria para la Reforestación (Foresta) trabaja desde el pasado mes de marzo en la recuperación de la cumbre de Gran Canaria, afectada por los incendios del verano de 2019, para lo que ha ocupado a 51 desempleados que han plantado hasta ahora 3.823 árboles.

Se trata del "Programa Mixto de Empleo y Formación,Foresta Plantamos Futuro", a través del cual se realizan labores de reforestación y conservación para recuperar la masa forestal de la cumbre grancanaria tras los grandes incendios del pasado verano, incendios del pasado año, explica la entidad privada en un comunicado.

El proyecto, financiado por el Plan Integral de Empleo de Canarias (PIEC) y subvencionado, coordinado y supervisado por elServicio Canario de Empleo, cuenta con una dotación económica de unmillón de euros y ha permitido contratar a desempleados durante 12meses, hasta el próximo mes de marzo de 2021.

Hasta el momento, los participantes del programa han plantado 3.823 nuevos árboles, cubriendo un total de 42.926 m2, si bien la Fundación prevé repoblar más del doble de esta superficie al final del proyecto y realizar labores de mantenimiento de todas las repoblaciones en los próximos meses.

El programa tiene como objetivo proporcionar a los beneficiarios los conocimientos prácticos y teóricos necesarios para desempeñar labores de operario forestal.

Además, y con el fin de facilitar su inserción en el mercado laboral, los participantes obtendrán certificados de profesionalidad al terminar su período de formación.

Los beneficiarios son personas mayores de 18 años que están empadronadas en los municipios afectados por los incendios forestales ocurridos en Gran Canaria durante el verano de 2019.

En la contratación se ha priorizado a las personas con escasa formación académica y en riesgo de exclusión, y se ha dado preferencia a las mujeres, a las que se ha destinado más del 55 % de los puestos de trabajo.

Entre las actividades formativas que llevan a cabo destacan las de repoblación, las operaciones de corrección hidrológico-forestal, la construcción y mantenimiento de caminos forestales, la creación de cortafuegos y puntos de agua, el tratamientos de apeo y poda o la manipulación y la aplicación de productos fitosanitarios para el control de plagas.

Los participantes han desarrollado desbroces y clareos en las zonas arrasadas por el fuego en los municipios de Valleseco, Teror, San Mateo, Artenara y Tejeda, sobre todo durante los meses de verano para preparar el terreno e iniciar la reforestación con las primeras lluvias del mes de noviembre.