Un nuevo mirador será instalado en el Faro de Sardina, en Gáldar, para potenciar las vistas de la zona, desde donde se pueden apreciar la Punta de Sardina, los altos de Tamadaba desde el Risco de Faneque hasta el Andén Verde e incluso el Teide.

Un proyecto del Cabildo de Gran Canaria, con un presupuesto de 83.056 euros, está a punto de culminarse tras cuatro meses de trabajo para dotar a este emblemático lugar de una plataforma de frente panorámico abierto.

El mirador está concebido como una plataforma/camino que se apoya en las huellas de las sendas ya existentes en la zona, con la clara intención de no producir más ‘cicatrices’ en el territorio. Una infraestructura respetuosa con la naturaleza, según el Cabildo, para cuya construcción se han utilizado módulos de hormigón arquitectónico prefabricado, que se han asentado sutilmente sobre el terreno hasta configurar un resultado final, en el que la superposición de elementos a diferentes niveles forma bancadas y graderíos. De igual manera y con el mismo afán de conservación de este enclave natural, también se ha mejorado el acceso al mirador, mediante la rehabilitación superficial del vial de la zona, la ordenación de los aparcamientos y la limitación del tránsito rodado de vehículos.

Inés Miranda, consejera de Politíca Territorial y Paisaje, considera que esta intervención «realza los valores de nuestra Isla».