La contaminación del aire a consecuencia de la calima ha hecho que el Gobierno de Canarias envíe una alerta para que se reduzcan las actividades en el exterior, en especial, las personas que pertenecen a los grupos de riesgo.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de España reflejó este viernes que en la provincia de Las Palmas el indice de calidad del aire era «desfavorable» a causa de la densidad del polvo sahariano. En este sentido, la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, a través de la Dirección General de Salud Pública, recomendó en un comunicado evitar la exposición prolongada en exteriores. Asimismo, han sugerido a la población que tomen precauciones como mantener las ventanas cerradas y no realizar esfuerzos físicos al aire libre.
De igual forma, Sanidad recordó que el polvo en suspensión contribuye a resecar las vías respiratorias y, en muchas ocasiones, se puede provocar un agravamiento de afecciones o síntomas relacionados con enfermedades respiratorias, tales como el asma, personas con enfermedad obstructiva crónica (EPOC). Lo que ocasiona que aumenten las visitas a los servicios de urgencias y los ingresos hospitalarios en algunos casos.
Por tanto, la exposición a este contaminante «puede producir molestias torácicas, tos, palpitaciones, fatiga o incremento a la susceptibilidad a infecciones respiratorias, al menos durante los cinco días posteriores al inicio del episodio».
El índice del PM10 (particulas en suspensión) establece como buena la calidad del aire cuando está entre 0 y 20 micras. De 21 a 40 es razonablemente buena, de 41 a 50 es considerada regular. Mientras que a partir de las 51 ya pasa a ser desfavorable, muy desfavorable de superar las 101 y extremadamente desfavorable si ronda entre las 151 y 1200.
En concreto, la capital grancanaria en la estación del Mercado Central se alcanzó el nivel 88.9 en el índice del PM10 (partículas sólidas o líquidas de polvo, cenizas, hollín, metálicas, cemento o polen, dispersas en la atmósfera) a las 18.00 horas. Por ello, el Gobierno alertó sobre la posibilidad de que la población pudiese experimentar en esta zona «efectos negativos sobre la salud», una situación que, además, destacaron es «mucho más» serias para los grupos de riesgo. Mientras que en la de San Nicolás el PM10 llegó a 138.8, por lo que la calidad del aire fue muy desfavorable y se consideró un condición de «emergencia para la salud pública». En la estación de Jinamar III Fase este índice ascendió a 102.5 por el mismo material particulado.
En Telde, la situación fue similar y es que en la estación de San Juan el índice PM10 rozó los 108.7. A Pozo Izquierdo, en Santa Lucía de Tirajana, también llegó la densidad de la calima que ubicó en un 64.4 el índice de PM10 en el medidor de ITC.
En Puerto del Rosario, por su parte, la calidad del aire también fue muy desfavorable tras alcanzar un nivel de PM10 de 108 en la estación Casa Palacio de la capital majorera. Mientras que en Lanzarote, la estación de Las Caletas, en Teguise, registró un índice desfavorable a consecuencia del PM2.5 (partículas finas en suspensión) que llegó a 36.4. En la categoria de calidad del aire, se considera que está buena cuando este material particulado se encuentra entre 0 y 10. Pasa a ser desfavorable a partir de 26 y extremadamente desfavorable entre 76 y 800.
Entre las recomendaciones, apuntaron que recomiendan reducir las actividades prolongadas y enérgicas al aire libre, «especialmente si se experimenta tos, falta de aire o irritación de garganta». En cuanto a la población de riego y personas sensibles, aconsejaron que, de realizar alguna actividad, esta sea en el interior o que se posponga para cuando la calima se disperse.
Por lo tanto, se recomienda a las personas sensibles a este tipo de episodios -como niños, ancianos y personas con enfermedades respiratorias o cardiovasculares crónicas las medidas siguientes: No salir a la calle y mantener cerradas puertas y ventanas de las casas, realizar la limpieza de las superficies con el polvo con paños húmedos, mantenerse en ambientes húmedos e hidratarse, no realizar ejercicios físicos en el exterior. Además, en el caso de empeorar los síntomas respiratorios, aconsejan llamar al Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) del 112 de Canarias.
